Jadue gastó $240 millones de la ANFP para su defensa en EE.UU.

Hace exactamente un año estallaba a nivel mundial el caso que más tarde se conocería como FIFA Gate. En ella se involucró inicialmente a nueve de los 10 presidentes miembros de la Conmebol como actores directos de sendos sobornos.

Al día siguiente, el 28 de mayo de 2015, Sergio Jadue apelaba a su inocencia. Incluso afirmó ser ese décimo presidente "limpio" del fútbol sudamericano.

Paralelamente, y en esa misma jornada, Jadue instruía a Óscar Fuentes y a José Pablo Forteza (ambos abogados) a contratar un estudio jurídico en Estados Unidos (Chafftez Lindsey) para iniciar su defensa y la de la ANFP. Al menos, así se le planteó al directorio para la aprobación de US$250 mil que debía desembolsar la Asociación.

Meses más tarde –en octubre de 2015- Sergio Jadue contrató a espaldas de los miembros de la mesa otro estudio de abogados -también norteamericano- para que tomara su defensa.

Esta vez el monto ascendía a US$100 mil, dinero que salió nuevamente de las arcas de la ANFP. El primer pago, equivalente a la mitad del monto, se realizó al contado.

Precisamente, Jadue -que fue castigado de por vida por la FIFA- gastó 242 millones de pesos, pertenecientes al patrimonio de la ANFP, solo en su defensa personal.

La auditoría forense arrojó, entre varios otros episodios, el descrito. Además, se constató que ninguno de estos pasajes fue consultado ni advertido en el Consejo de Presidentes.