AS Memoria
A 14 años del primer título mundial de Chile en Düsseldorf
En 2003 González, Massú y Ríos entraron en la historia al conquistar la Copa Mundial por Equipos en Alemania, lo que sería un presagio de los Juegos Olímpicos.
La historia del tenis chileno está llena de triunfos memorables; por algo es uno de los deportes con más logros en el deporte nacional. Una de las importantes fue la que consiguió el equipo de Fernando González, Marcelo Ríos y Nicolás Massú, quienes se coronaron campeones del mundo el 2003 en Düsseldorf.
El extinto torneo reunía a los siete mejores países del mundo de acuerdo al promedio de ránking de sus principales exponentes, más el local Alemania. Así fue la primera conquista en la historia del tenis chileno a nivel de equipo, lo cual fue un presagio de lo que pasaría un año después en los Juegos Olímpicos de Atenas.
Chile quedó en el Grupo Azul ante el local, Suecia y Argentina. El inicio fue accidentado ya que la lluvia obligó a trasladar la serie ante los germanos a una cancha alternativa techada, donde González superó a Burgsmuller y luego Ríos perdió sorpresivamente frente a Behrend. En el dobles, González y Massú comenzaron a afianzarse como una potente pareja y ganaron por 1-6, 6-2, 6-0.
Para el segundo enfrentamiento contra Suecia el capitán Horacio de la Peña hizo jugar a Massú en lugar de Ríos, y el Vampiro respondió con una clara victoria sobre el veterano Enqvist, mientras que el Bombardero despachó a Magnus Norman. Los futuros campeones olímpicos también ganaron el dobles.
En el cierre del grupo, ante Argentina, era un duelo decisivo: el que ganaba pasaba a la final. González se inspiró para vencer por primera vez a Nalbandian y luego el Chino, a pesar de las dudas por su estado físico, derrotó a una de sus víctimas preferidas, Gastón Gaudio, en sets corridos.
La final fue ante República Checa un 24 de mayo, y comenzó de la mejor manera con González superando a Jiri Novak en dos tie-breaks, pero Ríos no pudo ante Stepanek y todo quedó para definirse en el encuentro de duplas. En esa instancia, González y Massú mostraron su tremenda capacidad para imponerse 6-4, 6-2 a los checos y quedarse con el trofeo.
Fue la primera gran actuación de González y Massú como leyendas del deporte chileno y la última vez que estuvieron en acción junto al ex número uno del mundo. Al año siguiente lograron el bicampeonato en Düsseldorf pero, lo más importante, se hicieron inmortales al ganar el oro en Atenas.