El adiós del Comandante
Mario Salas se va de la Universidad Católica siendo un mejor entrenador del que llegó. Los triunfos y los fracasos seguro le servirán como soporte para una carrera en la que no se ha saltado etapas. El ex volante de Everton, Unión Española, Colo Colo y Palestino fue ayudante técnico de Nelson Acosta en los viñamarinos, Preparador Físico en la Universidad de Concepción, entrenador en Tercera y Segunda División con Barnechea, DT de juveniles con Mundial incluido en la Roja Sub 20, clasificó a Copas Internacionales con Huachipato, consiguió un Bicampeonato con la UC y sumó una muy mala última campaña con los cruzados.
Salas las vivió todas. Las buenas y las malas. No demuestra la desesperación de algunos entrenadores que tras un campeonato luminoso se muestran ansiosos de dar de inmediato el gran salto. El Comandante ha masticado cada uno de sus pasos y aprende de todos, sobre todo de los malos.
Porque esta última temporada con los cruzados, transitando en los últimos lugares de la tabla, le debe servir a Salas para afinar el ojo al contratar refuerzos. Te puedes equivocar en uno, en dos, pero no en todos. Los que llegaron rindieron mucho menos que los que partieron.
Le sirve esta campaña a Mario Salas para demostrar que sabe y puede soportar la presión. No todos los entrenadores pueden decir eso. Incluso en el peor momento, no cambió su templanza y su discurso.
Le sirvió a Salas esta mala campaña para probar variados sistemas tácticos. Como no le encontraba la vuelta al equipo, como las lesiones llegaron en malos momentos, como muchos no rendían, el DT tuvo que agregarle páginas a su libro táctico. Y eso es sólo aprendizaje.
Puedes jugar mal, jugar bien, salir campeón o último, pero conseguir una identidad de juego es lo más valioso que puede conseguir un cuerpo técnico.
Mario Salas se va de la UC siendo un mejor entrenador del que llegó. Y la UC tiene dos títulos más en su galería. Por si a alguien se le olvidó.