ADN RadioConcierto Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Entrevista AS

El notable giro en la vida de Diego Olate: estudia Construcción Civil

El ex defensor de O'Higgins y Colo Colo hoy milita en Colchagua, pero eso no le impide prepararse para ejercer su nueva pasión. "El fútbol tiene una fecha de vencimiento", dice.

Diego Olate es un referente en Deportes Colchagua y además, cumple académicamente.

Diego Olate (31) está tranquilo. Después de varios años convulsionados en su vida, en los cuales incluso debió pasar algunos días en la cárcel por ser acusado de participar en un homicidio en 2013, hoy disfruta en Colchagua. Es referente del equipo más importante de la zona, esa misma institución que dio el golpe en la Copa Chile venciendo a Unión San Felipe por penales.

"Estoy disfrutando. Las condiciones económicas no son las mejores, pero llego a mi casa todos los días. Eso es impagable. Estás bien anímicamente y pasa todo a segundo plano", comenta en conversación con AS Chile.

Olate viaja solo 30 minutos desde su casa al lugar de entrenamiento donde hoy trata de aconsejar a los más jóvenes a seguir un buen camino. Eso lo motiva. 

-¿El futbolista vive una burbuja cuando juega en equipos importantes?
Uno comete muchos errores por no abrir los ojos. Claramente cuando el jugador pasa por momentos adversos en la carrera hay cosas más importantes que cortarse el pelo como futbolista y vestirte como un futbolista. El jugador está limitado para todo. No aprende nada más que ser futbolista. Yo quería aprender distintas cosas. Lo que me pasó claramente me sirvió y acá trato de enseñar. Que no se pongan límites, hay futbolistas que son muy básicos. ¿En qué sentido? En que no piensan más allá que el día a día, no se proyectan a futuro.

Él buscó otras alternativas. Tras dejar el fútbol por algunas temporadas, comenzó a trabajar en la Minera El Teniente, empleo que lo instó a estudiar. "Estoy en Construcción Civil, voy en tercer año y me gusta. Quiero que sea mi vocación, porque sé que el fútbol tiene fecha de vencimiento", dice. 

-¿Y seguir ligado al fútbol como técnico no es una opción?
No, para nada. Me bloqueé cuando dejé el fútbol por un tiempo. No quise estudiar, no me gustaría.

La ilusión de Olate por volver a la élite

Por su actualidad, el ex defensor de O'Higgins y Colo Colo siente que puede tener una revancha en las mejores categorías del país, aunque también reconoce que no arriesgará para continuar por varios años más en la alta competencia.

"Por la experiencia de compañeros que tuve, a medida que pasa el tiempo las recuperaciones son lentas y yo no quiero vivir eso. Quiero estar tranquilo y disfrutando. Yo quisiera jugar hasta mi cuerpo lo permita", explica.

-¿Y si aparece una oferta de una división mejor? 
Siempre lo he dicho, no tengo una fecha para retirarme. Se me abrió el apetito acá. Quiero seis meses en la B o en Primera. Ir a una división más alta. Hoy veo el fútbol de mejor forma. Antes era más inmaduro, cometía errores. Sería esa mi revancha. Estoy mucho más pleno. No perdí el ímpetu, no perdí, la velocidad, la fuerza. 

-¿Cree que pueda darse ese paso? 
En enero tenía la posibilidad de ir a Cobreloa, no les pareció lo que pedía y finalmente no se dio. Acá en la Segunda División hay buenos jugadores y si se abre una puerta excelente. Me conocía (Rodrigo) Pérez (DT de Cobreloa). Muchos me preguntaron si estaba latente esa posibilidad, fue como un premio. Espero que esta vez haya una posibilidad, no es tan descabellado que pueda volver a Primera o a la B. 

"Aprendí a sociabilizar" 

Si hay una cosa que destaca de su llegada a Colchagua es el crecimiento a nivel personal. Dice que se siente pleno y no solo en lo que respecta al fútbol, sino que también a lo que hay fuera de él. 

"Las caídas me abrieron la mente. Si las revanchas que la vida me diera eran en el fútbol o no, estaba todo bien. Cuando llegué acá, no tenía mayor información del club y la comuna, pero me terminé encariñando. Por más que hoy tengo mis cosas gracias a mis años de futbolista, hoy voy a disfrutar. En Copiapó entrenaba y me iba a dormir, no hablaba con nadie. Acá, sin los mismos recursos de otras etapas, disfruto hablar con la gente. Aprendí a sociabilizar. Que te reconozcan es hermoso", cierra.