El raro debut de Olmos: dirigió a Veracruz sin estar en la banca

Mal le fue a Juvenal Olmos en su estreno en el Veracruz, marcando su regreso a la dirección técnica luego de 11 años de inactividad. El chileno cayó por 4-0 ante Tigres y el duelo tuvo un condimento extraño para el chileno, puesto que preparó al equipo para el encuentro, pero no pudo sentarse en la banca, en la ciudad de Monterrey.

Sucede que Olmos aún no se encuentra habilitado para conducir a los Tiburones Rojos desde el borde de la cancha. El entrenador nacional debe certificar su título de director técnico ante la federación mexicana de fútbol, a raíz de los largos años que estuvo sin sentarse en una banca.

Los plazos de cumplimiento del proceso para regularizar su situación no dependen de Olmos. Finalmente será la federación azteca, en atención a sus protocolos al respecto, quien autorice la presencia del chileno en el campo de juego.

"Me siento renovado, contento, con el corazón inflado de poder tener una buena oportunidad y darme a mi una oportunidad en el fútbol. Mi carrera, a pesar de ser ascendente, fue corta. No fue una carrera larga y entonces me debía cosas", sostuvo el DT nacional en su presentación.

"Acepté el desafío, porque me sentí reconocido, querido, y me sentí necesitado. Esos factores son fundamentales para visualizarme dentro del proyecto. Sentí que tenía cosas que entregarle a Veracruz", agregó Olmos, quien tendrá una dura labor en pos de la recuperación futbolística de su nuevo elenco.

Los Tiburones Rojos ocupan el penúltimo lugar en la tabla de posiciones del torneo de apertura de México. Solo suman 6 puntos y únicamente aventajan al Atlas de Guadalajara (2), en las 6 fechas que se han disputado del campeonato. 

Además, el panorama también es complejo para la escuadra de Olmos en la tabla del descenso. Ocupa la penúltima ubicación con un coeficiente de 1,03 y el colista es Lobos BUAP de Puebla (0,94), que por ahora sería el cuadro en caer al ascenso azteca.