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Sudamericano Sub 20

La trastienda de la trágica eliminación chilena en Rancagua

La incredulidad e impotencia de los hinchas que llegaron a El Teniente fueron el reflejo del sentir del plantel, que se marchó golpeado. La tristeza marcó el fin de la ilusión chilena.

Rancagua
La Roja tuvo una dura despedida del Sudamericano Sub 20 que organizó.
MARCELO HERNANDEZ/PHOTOSPORT

Quedaban segundos para que la clasificación de Chile a la fase final del Sudamericano Sub 20 se consumara. Sin embargo, el estadio El Teniente quedó casi mudo tras la dramática definición de Carlos Cuesta, que hizo estallar a la numerosa hinchada colombiana que apoyó a su equipo. Los rostros nacionales, en cambio, reflejaban incredulidad y decepción. La Roja juvenil era eliminada del torneo que organizaba.

Quizás, los hinchas que dejaron sus ubicaciones en el minuto 85 del duelo entre el equipo de Héctor Robles y Colombia, ya sabían el final. El ambiente estaba tenso en Rancagua. Que Chile se refugiara durante los últimos 20 minutos frente a un rival que jugaba con un hombre menos por más de una hora, irritó a casi todos. Los que no, solo se tapaban la cara. Ya no querían mirar. Solo esperaban que el paraguayo Mario Díaz de Vivar pitara el final y salir del sufrimiento. Pero no. El final llegó recién después del milagroso gol rival.

La gente no lo soportó. Los hinchas se trasladaron a la boca del túnel y se desquitaron con duros insultos en contra del DT. El plantel chileno entró a camarines sin hablar. El golpe fue muy fuerte. Por la zona mixta ningún jugador paró y se dirigieron al lugar donde sus familiares los esperaban. Todo esto mientras Héctor Robles anunciaba en conferencia de prensa que no seguiría al mando.

Minutos más tarde, Sebastián Moreno analizaba el fracaso. El presidente de la ANFP, ya había conversado brevemente con el entrenador chileno tras el partido.

El plantel, en tanto, compartió con sus cercanos durante una hora. Luego se despidieron para regresar a la concentración en la que sería la última noche juntos antes de regresar a sus clubes.

Desde ahora, el futuro de los 23 jugadores y Héctor Robles será lejos del Sudamericano.