U. Católica 4 - U. de Chile 0
Católica profundiza la crisis de la U y golea en San Carlos
Los cruzados golearon sin contemplación a su archirrival en San Carlos de Apoquindo. Los azules no pueden salir de los puestos de descenso.
La algarabía estalló con el pitazo final. Los jugadores de Universidad Católica se abrazaron, cantaron y saltaron junto a sus hinchas. Alegría total. Pero al mismo tiempo, el drama se apoderó de los rostros de los jugadores de Universidad de Chile. Cabizbajos se retiraron, sin encontrar explicación al peor momento deportivo en muchos años. El 4-0 final que favoreció a los locales puso justicia y, además, graficó el momento de cada cual.
Es que los cruzados fueron dominadores exclusivos durante todo el encuentro. Ni siquiera las llegadas de la U, a cuenta gotas, opacaron una jornada de ensueño de los dirigidos de Gustavo Quinteros, que solo tuvieron algo de susto tras un error de Kuscevic, en el primer tiempo, que derivó en la mejor llegada de los azules, que, nuevamente, Matías Campos López desperdició solo frente a Dituro.
El vendaval cruzado monopolizó el segundo tiempo. Y fue José Pedro Fuenzalida, la mejor figura, el que abrió el marcador, aprovechando la soledad con que desbordó por el sector derecho. Aquel inicio del complemento solo fue una clara respuesta de lo que sucedería en los próximos minutos.
La U simplemente desapareció del terreno de juego. Ni siquiera el ingreso de Gonzalo Espinoza, debutante en el torneo, pudo acercar, en algo, el ideal futbolístico que busca Alfredo Arias. Al contrario. El mediocampo cruzado se adueñó del trámite de juego.
Por eso no extrañó que los locales ampliaran las cifras mediante una buena jugada que culminó Edson Puch (60’), tras una notable jugada en la que participaron Lobos, Aued y Fuenzalida.
El descalabro azul y, por contraparte, la felicidad extrema de los cruzados llegó a los 67’. Duvier Riascos garantizó el triunfo local a los 67’, tras aparecer nuevamente en soledad por el sector izquierdo de la zaga azul: aprovechó un preciso pase de Fuenzalida y batió a Herrera con suave remate cruzado.
La sentencia final llegó por cuenta de Aued, que anotó el 4-0 que graficó con justicia lo que aconteció durante todo el partido.
En los minutos finales la U se descontroló. Y prueba de ello fue la expulsión que sufrió Espinoza, quien agredió a Aued mientras alzaba los brazos para ampliar la celebración de los hinchas cruzados.
Los minutos finales, como era de esperar, bajaron la intensidad del cotejo, que sólo duró 60 minutos como expresión de lucha. Los cruzados se dedicaron a manejar el balón y se crearon algunas ocasiones de anotar. Los azules aguantaron como pudieron para no rubricar una peor jornada en cancha de su archirrival.
De esta forma, los cruzados se alzan como punteros del torneo, mientras que su clásico rival se hunde en puestos de descenso. Y Arias vuelve a fracasar en su idea de sacar a su escuadra del pozo.