La oncena de Chile ante Haití el 2007 que seguro no recuerdas
Acosta fue el técnico en el empate sin goles de la Roja con los caribeños. Se jugó bajo un diluvio y Chile terminó con dos lesionados antes de la media hora.
En mayo de 2007, la selección chilena -en ese entonces comandada por Nelson Acosta- viajó a Haití como parte de la preparación para la Copa América que se jugaría en Venezuela a mediados de año.
El duelo se gestó como "regalo" para la misión humanitaria que el Ejército de Chile realizaba en aquel país. Acosta decidió llevar una "selección de proyección" con jugadores del medio local.
La previa estuvo marcada por las fuertes medidas de seguridad con que la Roja llegó a Puerto Príncipe. El plantel nacional, de hecho, debió extremar medidas para evitar el contagio de la malaria y otras enfermedades propias de la zona.
En lo netamente futbolístico, el encuentro se jugó bajo un verdadero diluvio. La condiciones climáticas y el juego brusco de los haitianos le pasaron la cuenta a la selección chilena. Boris Rieloff y Roberto Gutiérrez debieron abandonar el campo de juego antes de la media hora. Los dos se fueron lesionados y no en camilla, porque simplemente en el estadio no habían.
Y eso no fue todo, pues la lluvia provocó graves daños al equipo de la TV haitiana que transmitía el partido. Al final, el duelo se terminó grabando a una sola cámara. En Chile, la gente apenas pudo seguir la señal internacional que llegaba desde el Caribe.
Finalmente, Chile y Haití igualaron sin goles. La formación de Acosta ese día fue la siguiente: Nicolás Peric; Boris Rieloff (27' Boris González), Sebastián Roco, Mauricio Zenteno, Roberto Cereceda; Fernando Manríquez, José Luis Cabión, Carlos Villanueva (48' José Contreras), Daniel González; Roberto Gutiérrez (47' Juan Lorca) y Rodolfo Moya (17' Mathias Vidangossy).
¿Caras alegres? Pese a todo, jugadores como Peric, Roco, Cabión, Villanueva y Lorca terminaron metiéndose en la nómina final de la Copa América de Venezuela, la que terminó con el tan recordado "Puerto Ordaz". Esa es otra historia, en todo caso...