Premier, Serie A y la Liga: las millonarias ofertas que tuvo sobre la mesa Edu Vargas

Eduardo Vargas encontró estabilidad en México, sin embargo, hace casi una década su destino estaba lejos de ahí. En 2011, el artillero de Universidad de Chile marcó 28 goles solo ese año, coronándose tricampeón del Torneo de Apertura, del Clausura y de la Copa Sudamericana, campeonato en el que fue la gran figura tras ser el goleador del certamen.

Fue así como despertó el interés de grandes equipos de Europa. Uno de ellos fue el Zénit de San Petersburgo, elenco que envió una pequeña delegación a Chile en los primeros días de diciembre del 2011.

Funcionarios de la U en aquella época recuerdan que en el edificio del Centro Deportivo Azul, la oferta por 10 millones de dólares del club ruso tenía muy contentos a los dirigentes azules.

Sin embargo, aparecieron otras ofertas que dilataron un poco la decisión que tomarían en conjunto entre el futbolista, sus representantes y la regencia de los universitarios. El primer club que intentó entorpecer la negociación fue el Dinamo de Moscú, que aseguró que podía igualar la oferta del Zénit.

La Premier y la liga italiana

Poco después del interés de los rusos, apareció el Chelsea, club por el que apostó Eduardo Vargas apenas escuchó sobre el interés del equipo londinense. Eso sí, los blues solo se contactaron en un par de ocasiones y nunca enviaron una propuesta formal.

Es ahí cuando aparece el Napoli, que mejoró la oferta de los rusos. Eran 14,8 millones de dólares que se repartirían entre la U y Cobreloa, dueño del 50% del pase del jugador.

Antes de que universitarios y napolitanos llegaran a acuerdo, apareció la A.S. Roma y el Espanyol, pero ambas propuestas se rechazaron: la del elenco romano incluía porcentajes altos para representantes, jugador e intermediarios, lo que hubiera resentido fuertemente el monto recibido por azules y naranjas, mientras que la del cuadro catalán fue por 4 millones de dólares, un precio muy alejado de lo que fue la venta definitiva.

La dirigencia encabezada por Federico Valdés comprometió su palabra con el representante de Vargas, acordaron con el Napoli y se pusieron un plazo de dos días para estructurar el contrato definitivo. En eso, apareció Massimo Moratti, presidente y propietario del Inter de Milán, que hizo lo posible por entorpecer la negociación con la escuadra napolitana, aunque no lo logró.

Finalmente, tal como habían acordado, Eduardo Vargas le dio el “sí” al Napoli y jugó la definición del Torneo de Clausura y la Copa Sudamericana, siendo oficialmente jugador del equipo que hace de local en el San Paolo.