Varios son los casos de deportistas disconformes con los protocolos de la Beca Proddar (Programa de Desarrollo para Deportistas de Alto Rendimiento). El formato ha sido objeto de críticas durante los últimos años, debido a lo "enmarañado" que resulta el procedimiento a la hora de evaluar quién la merece y quién no. Ahora, se suma otro más: el de Josefina Fuentealba (20), judoca que perdió el beneficio debido a una rotura de meniscos y ligamentos cruzados de la rodilla derecha, sufrida en 2018.
Debido a esta incapacidad física no pudo ser evaluada en 2019 y, en consecuencia, fue ingresada al proceso de exclusión de esta asistencia gubernamental. El principal conflicto es que esta lesión la afectó mientras defendía a la selección nacional en un concentrado que tuvo lugar en Brasil. "Presenté todos mis certificados, que acreditaban cómo y cuándo había sido. Yo me destrocé la rodilla esa vez, pero aún así no lo tomaron en cuenta" , declara Fuentealba, en conversación con AS.
Incluso, apeló una vez que logró retornar a las competencias, exhibiendo como credenciales su medalla de oro en el Open Panamericano de Lima , o la presea de plata en el Open Panamericano de Santiago, ambas obtenidas el año pasado. Pero eso tampoco funcionó. Debido a esto, la destacada deportista (que se prepara para los Panamericanos de Santiago 2023) decidió dar a conocer esta situación a través de redes sociales.
- Usted presentó un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Santiago, ¿en qué estado se encuentra ese trámite? - Aún está en curso. En realidad, no sé exactamente cuáles son los plazos. Pero lo hice luego de presentar los documentos que emitió la Comisión Médica del CAR (Centro de Alto Rendimiento), los que acreditaban la gravedad de mi lesión.
- ¿Cree que la manera de otorgar la beca debiese cambiar? Ya que, viendo su ejemplo y el de otros deportistas, al parecer no se hace diferencia cuando la lesión se produce representando al país en una competencia. - Totalmente. Las políticas de la beca debiesen cambiar. Los estatutos son súper malos. Y yo sin ese aporte no puedo competir, se me complica todo. Además, mi deporte es de contacto físico, siempre uno está expuesta a lesiones, entonces no se entiende. Además no solo me afecta a mí, sino que también a todo mi equipo, a Marcos Soto que es mi entrenador, y a Gabriel Inostroza, mi preparador físico. Y claro, seguro que a muchos deportistas más les ha pasado y seguirá pasando.
- Natalie Lubascher, nadadora de sincronizado, también tuvo problemas con su Beca Proddar y, hace unos meses, confesó que incluso había pensado en renunciar a la Selección, ya que sin el beneficio se hace aún más difícil. ¿Usted ha pensado en eso? - Sí, obviamente. Yo creo que la gran mayoría de los seleccionados ha pensado eso en algún minuto. El apoyo e interés es poco. Uno se lesiona y lo dejan botado. Y, además, la gran mayoría trabajamos o estudiamos. Entonces compatibilizar eso es complicado, es difícil llegar o mantenerse en la élite de esa forma.