"Favores personales": la frase que profundizó el quiebre de Colo Colo
Cuatro directores firmaron una carta, donde acusan irregularidades en los procesos de fichajes. Harold Mayne-Nicholls arremetió: "Es una falta de respeto a los jugadores".
La reunión de Blanco y Negro este jueves estaba cerca de concluir, cuando Alfredo Stöhwing pidió la palabra. El director leyó una carta de tres páginas que definía, a su juicio, los siete grandes problemas que vive Colo Colo en la actualidad. El documento, también firmado por los directores Carlos Cortés, Diego González y Angel Maulén, relató una serie de hechos que habría desencadenado la crisis. Pero también planteó soluciones. Y fue en ese último punto donde se incluyó una grave denuncia, que remeció nuevamente al club.
"Colo Colo no puede seguir con el desfile de directores técnicos que ha tenido los últimos años, no se puede seguir contratando jugadores como un favor personal, se debe impulsar fuertemente el desarrollo de nuestra cantera para llegar al plan 60/40". Entre medio de la idea sobre los entrenadores y la idea sobre el Fútbol Joven, los cuatro directores plantean la existencia de irregularidades en los procesos de fichajes.
La frase generó molestia en el bloque oficialista, que encabeza Aníbal Mosa y Harold Mayne-Nicholls. Este último respondió: "Es una falta de respeto absoluta a los jugadores. Todas las decisiones sobre a quien se contrata o a quien se renueva, pasan por el directorio. Nunca hubo algún director que haya manifestado un reparo. Entonces aparecer con algo de esto tipo, es una verdadera falta de respeto. Acusan a terceros, cuando ellos también participaron en la aprobación de refuerzos".
Desde que Aníbal Mosa volvió a la presidencia, en abril del 2019, Colo Colo ha contratado a seis jugadores: Iván Rossi, Leonardo Valencia, Miguel Pinto, César Fuentes, Matías Fernández y Nicolás Blandi. La gestión de Marcelo Espina (director deportivo) concretó otros 11 fichajes, pero durante el periodo de Gabriel Ruiz-Tagle. El ex ministro del Deporte es cercano a los cuatro directores denunciantes.
Mayne-Nicholls complementó: "Cuando uno hace una aseveración de este tipo, cae en el anonimato, porque no hay nombres concretos. Si los hubiesen, ahí podríamos evaluarlo, pero cuando dispara a todos, es una práctica poco valerosa. No es mi estilo. Cuando yo tengo algo que decir, voy y lo digo. No se lo mando a decir a nadie. Esto lo encuentro gravísimo, porque es un ataque a alguien que no tiene cómo defenderse. Nosotros sí. ¿Pero quién se va a defender del plantel? Es un agravio gratuito", cerró el vicepresidente.