La explicación de Quinteros por el inusual esquema albo: 5 delanteros y triple 9

Colo Colo tenía la obligación de ganar ante Wilstermann en el Estadio Monumental para lograr la clasificación, por lo menos, a la Copa Sudamericana, pero la defensa del cuadro boliviano le negó todo tipo de opciones al cuadro albo.

Gustavo Quinteros demostró que es consciente del difícil momento del equipo, ya que realizó cambios ofensivos ad hoc a lo que se necesitaba: jugar al todo o nada, algo que pocas veces realizó anteriormente en Universidad Católica, donde se caracterizaba por el juego ordenado.

El cuadro albo comenzó jugando con Costa, Paredes y Bolados en ofensiva, y luego en el segundo tiempo, cuando se dio cuenta que su recurso más seguro para llegar al área eran los centros, incorporó a Parraguez y Blandi, sacando a Valencia y Paredes.

"Intentamos 45, 60 minutos de jugar el fútbol que queríamos, y no tuvimos luces como para vulnerar una defensa muy bien organizada que se metió atrás. Tuvimos mucho la pelota, pero no tuvimos claridad para hacer daño. Llegamos con centros, no tuvimos posibilidad, entonces cambié totalmente la forma, puse dos delanteros, y tuvimos dos posibilidades de cabeza, las dos de Blandi", fue la justificación del técnico para el cambio.

En los minutos finales Colo Colo poblaba con varios jugadores el área de Wilstermann, e incluso Iván Morales, que hizo su reaparición tras una larga lesión, ingresó por Óscar Opazo para sumar otro agente ofensivo con un posible cabezazo, que no le funcionó a Quinteros.

"Hoy jugamos mejor que el rival, tuvimos mucho la pelota, llegamos con centros, con pases, pero ninguna muy clara. Fueron las dos más claras con centros de costado y dos cabezazos. Era obligación nuestra, estando de local y demás, ganar el partido, y no lo pudimos conseguir. La responsabilidad de la derrota es mía y la asumo", complementó el técnico tras la derrota, reafirmando que está en conocimiento del difícil momento que enfrenta.