Emilio Rentería (36) dejó su huella en el fútbol chileno. En San Marcos de Arica , la hinchada aún lo recuerda producto de sus goles y buenas actuaciones en el ataque nortino. También jugó en Ñublense durante unos meses, antes de regresar a Venezuela, su país. Hoy, continúa jugando. Lo hace en el Academia Puerto Cabello , de la Primera División llanera.
"Me siento muy bien. Fuera de lesiones, si Dios quiere, me quedan unos tres años de carrera", señala en charla con AS Chile, donde recuerda de inmediato sus años en el país .
"Tengo muy buenos recuerdos de mi etapa allá. Siempre me gustó jugar en el fútbol chileno, soñaba con eso y se me dio la oportunidad. Estoy muy agradecido de San Marcos Arica y de Ñublense, que me dieron la chance de jugar allá. Tengo amigos y me siguen escribiendo", comenta.
Rentería no guarda rencor. En Chile vivió la situación más triste en su carrera profesional . En 2014, fue víctima de racismo por parte de algunos hinchas de O'Higgins en Rancagua y días más tarde por fanáticos de Deportes Iquique, en el duelo que enfrentó a los 'Dragones Celestes' con San Marcos.
-¿Cuánto le costó asimilar lo que sufrió? - Yo eso lo había visto por la tele por los casos de Dani Alves o Samuel Eto’o y cuando les pasó eso decía ‘conchale, no es para tanto’. Pero en ese momento, me tocó vivirlo. Me sentía despreciado. Llegué a mi casa y me puse a llorar, porque en ese tiempo aún no llegaba mi novia. Tengo que agradecer a mis compañeros, porque me llamaron y estuvieron conmigo todos. Yo no le había contado a mi familia, pero después de dos días me llamaron preguntándome por qué no les había contado. Mi madre se quería morir. Y eso más me mató todavía. Me llamó el ministro del Deporte de Venezuela para preguntarme cómo estaba y para decirme que tomara mis maletas y me fuera de Chile. Hablé con mi representante, me calmaron y estaba todo tranquilo. Estuve con la ministra del Deporte de Chile (Natalia Riffo) y me dieron un decorado porque no querían que me fuera de esa manera.
-¿Se imaginó ese revuelo? - Sí, porque me dolió mucho en el momento, pero cuando recibí la llamada del Gobierno me asusté en un momento, porque no quería irme de Chile (risas). Me sentía muy bien con mis compañeros en Arica, que fueron grandes personas conmigo. Me llamaron desde España por la Asociación de Jugadores por el Racismo. Muchos me llaman para preguntarme si tengo un rencor contra Chile y para nada. Tengo muchísimos más recuerdos bonitos.
-¿Qué le genera ahora cuando ve más casos de racismo teniendo en cuenta que usted pasó por eso? - Es una sensación muy mala. Hace poco dejaron solo a un jugador en Portugal que fue expulsado. Sus compañeros lo dejaron solo. Lo vi muy mal. Balotelli también vivió hace poco un episodio así. Yo fui ofendido, pero todos mis compañeros me apoyaron, estuvieron a mi lado. Algunos de los rivales también me llamaron. Ahí tú ves que no puedes generalizar con todos los chilenos. En Venezuela también hay gente mala, pero eso no quiere decir que todos sean malos.
-¿Le hubiese gustado estar más tiempo en Chile? - Para mí, fue muy corto. Siempre quise quedarme un tiempo más. Había otras cosas para ver, por el problema que tuve allá. Mi familia no quería que me quedara en Chile, pero yo sí quería quedarme, porque soñaba con ganar títulos. No se logró, pero sigo jugando y voy para adelante.
-¿Qué extraña de Chile? - Muchas cosas. Había algunas curiosas. Por ejemplo, cuando mis compañeros hablaban con sus novias, decían ‘es que estoy hablando con mi polola’ (risas). Y el acento también. Les echaba bromas a mis compañeros y ellos a mí, era divertido. Arica me gustó mucho, extraño esa gente que iba por la calle, me saludaba y me daba un consejo por lo que me pasó. Una vez llegó una persona llorando disculpándose y yo le dije que estuviera tranquila, eso nunca lo olvido. Tengo muchos amigos chilenos, no por uno voy a juzgar a todos.
-¿Siente la ilusión de volver a jugar en el país? - No lo veo como una etapa cerrada. Siento aún las ganas de jugar en Chile. Me gustaría dejar una huella más allá de los goles, jugar una Libertadores o una Sudamericana con un club chileno me encantaría. Hasta que no me retire, no cierro las puertas.
"La selección estaba en la misma etapa que la U y Dudamel pudo levantarla"
Emilio Rentería también se da el tiempo para analizar la llegada de Rafael Dudamel a la U. Según su punto de vista, el DT es el hombre indicado para el resurgir de los azules.
- ¿Qué opinión tiene de Dudamel, nuevo técnico de la U? - No he tenido la dicha de tenerlo de entrenador, pero pude competir contra él y la sensación que me dejó como técnico es muy buena. Llegó a la final del Mundial Sub 20, pero a algunas personas aquí no les gustó la manera en la que se fue, pero lo hizo muy bien en la Selección. Le deseo lo mejor en la U.
- ¿Cree que está preparado para un desafío como la U? - Creo que sí. Pienso que le va a ir de la mejor manera, porque la selección venezolana estaba de la misma manera que como está la U. Sigo mucho el fútbol chileno y sé en la posición que va. La Selección estaba en la misma etapa que la U y pudo levantarla con su esquema de juego y le fue muy bien. Dios quiera que lo repita ahora.
-¿Cómo ve el mercado chileno para los venezolanos hoy? Hay muchos jugadores y ahora llegó un DT... - Te voy a ser sincero: allá tienen un fútbol mucho más alto que en Venezuela. No sé si es por la mentalidad o por la forma de jugar. Nuestro fútbol es de correr mucho, en Chile no se corre tanto, pero se piensa más, entonces no te marcan tan rápido como acá. Sin embargo, a los venezolanos en Chile les ha ido muy bien. Hasta ahora creo que la mayoría han marcado goles y la diferencia.