U. DE CHILE

Las 3 fallas de la U en su derrota con Cobresal

Universidad de Chile desperdició la gran oportunidad de seguir en la parte alta de la tabla y no perderle pisada a Unión La Calera, su próximo rival.

ANDRES PINA/PHOTOSPORT

Esteban Valencia sufrió su primera derrota en el Campeonato Chileno 2021. En El Teniente, Universidad de Chile se vio en desventaja prontamente y no pudo nunca anotarle a un equipo de Cobresal que luchó por obtener la victoria.

Sobre el final, Felipe Reynero terminó la faena, marcó su doblete y le dio tres puntos a los albinaranjas. En la U, entran las dudas, el propio técnico intentó explicar la caída en Rancagua.

Las tres fallas de la U

Error infantil

Por supuesto que no pasa todo por una jugada, pero el fallo inicial de Sebastián Galani fue marcando el camino. El partido comenzó intenso, la U empezaba a adueñarse de la pelota y, a los 11 minutos, el ex jugador de Coquimbo Unido hizo lo que nunca hay que hacer: pasarla al medio sin mirar. Su pase, desde la línea lateral de la cancha, fue una perfecta habilitación para Reynero, que apuró de primera y gritó tempranamente el 0-1, resultado que la visita intentó cuidar hasta el final.

Poca movilidad

¿De qué le sirve a la U jugar con un rombo si Marcelo Cañete tiene que bajar a buscar a la altura de Galani -el más centralizado- y por detrás de Gonzalo Espinoza y Mario Sandoval? Fue extraño lo que sucedió con los azules, que empezaron a generar de muy atrás y en ofensiva se fueron quedando sin apoyo. Le pasó a la dupla de ataque compuesta por Franco Lobos y Joaquín Larrivey, desasistidos y -por lo general- yendo a la lucha de balones divididos que en otros partidos ganaron, pero donde esta vez encontraron mejor resistencia. Pasó lo mismo, por ejemplo, con Yonathan Andía y Marcelo Morales: si bien no ejecutaron de la mejor manera todos los centros, en demasiadas ocasiones era la única alternativa que tenían, pues nadie llegaba a apoyar para servir como descarga o buscar la ventaja con una pared.

El factor "banca"

En partidos cerrados, siempre es necesario tener un banco de suplentes que ofrezca alternativas. Valencia, primero, demoró en reordenar el puzzle, pues en 15 ó 20 minutos del segundo tiempo, el encuentro seguía igual que en el comienzo. El "Huevo" apostó por el ingreso de Pablo Aránguiz, pero fue puesto por puesto. Recién a los 82 minutos reemplazó a Galani (uno de los volantes del equipo) y a esa altura tampoco encontró respuestas. A decir verdad, el propio entrenador se boicoteó, dejando fuera de la citación a Nahuel Luján, uno de los que mejor se puede desempeñar por la banda, sector de la cancha que la U nunca pudo explotar y en donde simplemente se limitó a lanzar el centro por compromiso.

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