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El verdadero lugar de la Generación Dorada en la historia del fútbol

La Roja

El verdadero lugar de la Generación Dorada en la historia del fútbol

Con este grupo de jugadores, la Selección Chilena consiguió los mejores resultados de su historia y obtuvo dos trofeos inéditos.

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Ante Uruguay perfectamente pudo ser la despedida de la Generación Dorada, que cambió completamente la historia de la Selección Chilena. La Roja quedó eliminada de Qatar 2022 y faltará por segunda vez consecutiva a una Copa del Mundo.

Luego de 105 años con buenos equipos y jugadores, pero de sequía en títulos, este grupo de futbolistas consiguió el bicampeonato de la Copa América y compitió hasta la última fecha del camino a Qatar.

Los nueve futbolistas con más partidos en la historia de la Selección, pertenecen a la Generación Dorada. Alexis Sánchez es el número uno en la lista con 148 partidos, seguido por Gary Medel (145), Claudio Bravo (143), Mauricio Isla (136), Arturo Vidal (133), Gonzalo Jara (115), Jean Beausejour (109), Eduardo Vargas (106) y Charles Aránguiz (96).

Alexis Sánchez es, además, el máximo goleador histórico (49) y el futbolista con más asistencias (39). Y en victorias, el tocopillano también es el número uno, con 69. Un dato categórico es que los doce jugadores con más partidos ganados, en los 111 años de la Selección Chilena, son de la Generación Dorada.

¿Por qué la Generación Dorada es la mejor de la historia de Chile?

Si bien es cierto que el máximo hito de la historia de la Roja sigue siendo el tercer lugar en la Copa del Mundo de 1962, tanto en títulos como en resultados, la Generación Dorada es la que mejoró completamente el rendimiento histórico de la Roja.

Desde su debut ante Argentina en 1910 (1-3) y hasta el fatídico 7 de julio de 2007, cuando Chile perdió 6-1 ante Brasil en Puerto La Cruz, la Roja jugó 593 partidos, con 210 triunfos, 130 empates y 253 derrotas. Rendimiento: 42,7 por ciento.

En la selección mayor, el punto de partida de la Generación Dorada es dos meses más tarde, el 7 de septiembre de 2007, cuando el equipo de Marcelo Bielsa debuta con una derrota 2-1 ante Suiza en amistoso jugado en Austria. Desde ese día, Chile ha jugado 203 encuentros, con 95 victorias, 43 empates y 65 derrotas, elevando su rendimiento a un 53,9%.

Por encima de las cifras generales, está la calidad de esas victorias. Esta generación, además del bicampeonato de Copa América (2015 y 2016), clasificó por primera vez a dos Copas del Mundo consecutivas (2010 y 2014), derrotó por primera vez a Argentina en un partido por los puntos en selecciones ‘A’ (1-0 en 2008), eliminó al campeón del mundo España en Brasil 2014 y venció al monarca de Copa América (1-0 a Uruguay en 2015) y de la Eurocopa en semifinales de la Copa Confederaciones 2017 (Portugal, por penales). Y la lista podría seguir.

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Llaves directas y finales

Hasta 2007, Chile jugó dos finales y perdió ambas por Copa América: ante Paraguay en 1979 y Uruguay en 1987. En los últimos 14 años, la Roja protagonizó tres finales y ganó las dos del Bicampeonato, perdiendo la de Copa Confederaciones 2017 ante Alemania. En llaves directas, la Generación Dorada ganó ocho y perdió siete, de un total de 15 que jugó. Y en los anteriores 97 años, en 22 ‘mata-mata’, el balance fue 11 contra 11.

Más goles y mejor defensa

Si comparamos los goles anotados y recibidos, la Generación Dorada muestra números muy superiores a los anteriores 97 años de la selección. En promedio, desde 2007 ha marcado 1,49 goles por partido, contra 1,28 del período 1910-2007. Y en trabajo defensivo, en los últimos 14 años, la Roja recibió 1,14 tantos por partido, contra 1,51 que totalizaron las generaciones anteriores.

Un número llamativo es que la diferencia de goles antes de 2007 fue de -76 y con la Generación Dorada es de 70 a favor. En algún momento está cifra fue positiva en el registro histórico, gracias a la notable campaña de estos jugadores, pero hoy está en -6. En diferencia triunfos-derrotas Chile nunca ha logrado tener números azules. Es una deuda para el futuro.