“Me pidieron mantener la categoría y proyectar jóvenes; me puse la camiseta y tuve que partir”

En la fecha antepasada del Campeonato Ascenso 2022, Universidad de Concepción cayó ante Temuco en los últimos minutos del duelo en el Germán Becker y posteriormente el DT Fernando Vergara fue desvinculado del club. El registro de 11 partidos sin victorias, tras la derrota como visita, y la baja ubicación en la tabla de posiciones al final gatillaron la salida del técnico nacional, quien dialogó con AS para analizar su paso por el Campanil. En total fueron cerca de ocho meses al mando del plantel, pues llegó al cargo a fines de septiembre de 2021. Finalmente, Miguel Ramírez se convirtió en su reemplazante.

“Me quedo con la mejor sensación, feliz de haber encabezado y estar inserto en un proyecto que tenía como objetivo principal la inclusión de muchos jugadores juveniles. Lo llevamos a cabo al pie de la letra, todos los partidos los jugamos con entre tres, cuatro y cinco jugadores juveniles. Incluso, en el último partido contra Temuco estuvieron en cancha siete jóvenes. En los entrenamientos, los jugadores crecieron mucho, maduraron rápidamente por la necesidad que tenía el club. Son jugadores que van a ser clave y van a ser el futuro de la Universidad de Concepción, ese era el proyecto inicial”, afirma Vergara.

“Nos quedamos con una sensación de que esto, en cualquier momento, iba a cambiar el rumbo e íbamos a obtener los mejores resultados. A mí me plantearon el proyecto, que consistía en mantener la categoría y, principalmente, en darle mucha cabida los chicos jóvenes, teniendo muy poco presupuesto para contratar. Se fueron como 15 jugadores y llegaron solamente cinco, y con muchos problemas presupuestarios. Vinieron porque nosotros los convencimos y la verdad es que también fueron un gran aporte. Lamentablemente, cuando hay un 60 por ciento del plantel con juveniles, obviamente que cuesta que los resultados lleguen rápidamente. Trabajamos, me puse la camiseta del club, creo que lo hicimos de la mejor manera, dimos todo para entrenarlos y para que realmente sean una opción real en los partidos”, agrega el ex DT también de Magallanes, Puerto Montt y Temuco en la segunda categoría del fútbol chileno.

- Los resultados no fueron los esperados, eso sí.

- Mira, fuimos competitivos en todo, sí hubo equipos que nos superaron en el juego, pero en lo general con estos jugadores jóvenes logramos competir, logramos igualar en el juego. Lamentablemente, por algunas circunstancias que tienen que ver más con el detalle y la cantidad de jugadores que uno puede tener en el plantel, no conseguimos los resultados esperados. Pero lo íbamos a hacer, a mí en algún momento la dirigencia me dijo que a mitad de año se podría abrir la posibilidad de contratar, por las circunstancias económicas que vive la Universidad de Concepción. No alcanzamos a llegar, yo me puse la camiseta con el proyecto y podría no haberlo aceptado. Sí lo hice, entendiendo que era una situación súper difícil para conseguir resultados inmediatos. Me puse la camiseta y lamentablemente tuve que partir. Así de fácil el tema.

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- ¿Qué le dijeron los dirigentes del club al momento de desvincularlo?

- Me dijeron que en el juego estábamos súper bien, que habíamos evolucionado, que se había conseguido el objetivo de los juveniles. Incluso el año pasado sacamos algunos que no estaban en el primer equipo. Que estaba todo bien, pero que los resultados mandan. Eso no me lo habían dicho al principio, porque solo me dijeron que había que mantener la categoría y que la idea era que solamente sacara chicos jóvenes y que lo hiciera competitivo. Tuvimos varios partidos para haber ganado, tuvimos los méritos para el triunfo, pero por a, b o c motivos no se pudo hacer, pero… cuando uno se pone la camiseta y se la juega por este proyecto, obviamente tiene que pensar que las cosas no son fáciles. Íbamos a pasar por momentos difíciles, porque si bien son chicos que tienen buenas condiciones y están preparados, todavía hay detalles que tienen que pulir. A veces costaron algunos puntos, pero en ese aspecto me quedo tranquilo. Di todo por el proyecto y me dijeron que me iba por los resultados más que nada.

- Solo pudieron ganar un partido en 2022.

- Hubo muchos partidos en que tuvimos muchos errores arbitrales y no pudimos conseguir el resultado que merecíamos en el juego. Era un campeonato, para nosotros, en el que estábamos a dos puntos del noveno. Todo estaba muy parejo, la mayoría de los equipos no superaba los 13 puntos. Ganando uno o dos partidos te podías acercar más. Pero tú lo puedes ratificar en las estadísticas: no hay un equipo profesional en Chile que ocupó más juveniles. Completamos casi la cuota de minutos en cancha, el equipo que más jugó con jóvenes fuimos nosotros y el plantel más joven del fútbol chileno también éramos nosotros. Me pongo la camiseta con estos proyectos y entiendo también que sí vamos a pasar por pésimos momentos, pero todavía no estábamos en situación de descenso. Fuimos competitivos con muchos chicos que hoy en día van a ser la base del futuro de la U. de Concepción.

- ¿Qué la pareció la respuesta futbolística de los muchachos jóvenes del plantel?

- Me pareció muy bien. Por eso te digo que me voy con una pena enorme, porque sí iban a dar frutos e íbamos a poder cosechar cosas importantes en el club. Sembramos mucho y la cosecha no la vamos a ver nosotros. Eso deja una pena enorme, los chicos respondieron, pero sí tienen problemas en algunos detalles. Solamente lo van a conseguir mejorar durante los partidos. Tuvimos expulsiones de chicos jóvenes, por ejemplo, por entrar por atrás, por algunas reacciones que tienen que ver más con la presión de los partidos. Están haciendo sus armas y fueron puros detalles que se iban a mejorar. Pero muy bien los chicos, muy buena disposición al trabajo y mucha calidad. Aparte de que fuimos un equipo que siempre enfrentó de igual a igual los partidos.

- ¿Al final cuál es la autocrítica que realiza de su gestión en el club?

- Lo que pasa es que la autocrítica va por aceptar estas condiciones. Entiendo como es el fútbol, pero fue decisión mía (aceptar) cuando me dijeron que el presupuesto iba a ser demasiado bajo para contratar, que íbamos a ser una de las planillas más bajas del torneo. Yo sabía el peligro que podíamos correr, pero confiaba hasta el último momento en poder revertir la situación, incluso con jóvenes.

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- ¿En términos futbolísticos qué le faltó al equipo para lograr un desempeño mejor?

- Yo creo que abrochar por partidos. Y eso significa concentración durante los 98 minutos. Es no tener miedo en las circunstancias de los partidos, donde tú tienes que estar más tranquilo para decidir mejor. Significa soportar y administrar mejor las presiones de un partido profesional. Todo ese tipo de cosas. Después, uno como técnico se puede equivocar en algún cambio, en alguna parte del planteamiento, pero como todos. Al final, lo más importante acá, y que hizo que no obtuviéramos los resultados que podíamos haber conseguido, fueron el tema de la concentración y el tema de haber tenido más minutos en el cuerpo para saber manejar resultados y los momentos que te va dando el partido. Eso solamente se iba a conseguir jugando, con más experiencia.

- ¿Qué viene ahora para usted?

- Esperar, pero estoy muy contento porque no me salí de un proyecto que encabecé y en el que me entregué de pies a cabeza. Lamentablemente, era peligroso, me la jugué toda, yo sabía que había un riesgo. Se lo dije a los dirigentes, sin embargo, ellos lo tenían claro y solamente me exigían no bajar. Al final, uno entiende que los resultados mandan y si tuviera que volver atrás, a lo mejor, hubiera exigido y peleado más por más refuerzos. Lamentablemente no se pudo, pero me quedo con un sabor muy alegre de haber contribuido al desarrollo de muchos jóvenes que van a tener a futuro un gran nombre en el fútbol chileno.