“Si quiero llegar a Primera o salir de Chile, jugar un quinto año en Segunda me iba a estancar”
El argentino Lautaro Rigazzi ha hecho toda su carrera en el fútbol local y, en 2025, consiguió llegar a la B: “Lo mejor era asegurarnos con esta opción”.


La vida de Lautaro Rigazzi está fuertemente ligada a Chile. Tras dejar Godoy Cruz, fichó por Provincial Ovalle, de Tercera División, y luego tuvo varias etapas en las categorías menores del fútbol local hasta fichar en el Ascenso al convertirse en refuerzo de Santiago Morning. Atrás quedaron los pasos del argentino por Comunal Cabrero, Provincial Ranco, San Antonio y Deportes Concepción.
Rigazzi, de 26 años, conversó con AS de cara al duelo contra Universidad de Chile por la tercera fecha de la Copa Chile. Sin embargo, el argentino también se dio un tiempo para revelar varios detalles de su carrera en en el fútbol nacional.
“El año pasado este mismo cuerpo técnico (liderado por Luis Marcoleta) me llamó para venir en 2024. Consideré que haber estado cuatro años en Segunda División ya era mucho, si mi intención era crecer. Si quiero llegar a una Primera División o salir del país, jugar un quinto año ya en la división me iba a estanca en cuanto al crecimiento. Junto con mi pareja y mi familia, pensamos que lo mejor era asegurarnos con esta opción de Santiago Morning”, manifestó el trasandino, quien llegó a Chile en 2019.
“Cuando estaba en la reserva de Godoy Cruz me llegó el límite de edad para firmar contrato. Me querían dejar jugando seis meses más jugando en la primera local que compite solamente dentro de Mendoza para tener la posibilidad de firmar el contrato a fin de año. Cuando uno es juvenil, en el club se hacen los contratos por cuatro años y por el mínimo. Yo no quería eso”, contó el argentino.
- ¿Ahí surge la posibilidad de venir a Tercera División?
- Claro, pero sinceramente no sé cómo se dio. Me llamaron directamente del club, que tenía un asesor, Leo Espinoza. Yo no tenía mucha idea de cómo era el tema de la división amateur y todo eso. Me llamó el técnico, me explicó cómo era y ahí estuve jugando seis meses.
- ¿Qué tal esa experiencia?
- Buena, jugué más del 80 por ciento de los partidos. Después, en los últimos partidos de la liguilla no me tocó jugar, el técnico me sacó. Me tocó enfrentar en dos ocasiones a Concepción y me llamó la atención que llevó al Ester Roa como 10 mil personas.
- Pero no llegó de inmediato al cuadro lila…
- Claro, partí el año entrenando en Fernández Vial, pero tenía el problema de los derechos de formación, no podía firmar contrato profesional. Hablé con la gente de Godoy Cruz, me ofrecieron volver pero sin firmar contrato. Estuve entrenando en Limache, pero me dijeron que no me iban a pagar hasta que pudiera jugar, porque el tema no estaba solucionado. Y ahí apareció el club Comunal Cabrero.
- También de Tercera División…
- Sí, me dijeron que me iban a pagar si yo entrenaba, pero alcancé a entrenar 20 días y agarró la pandemia. Me devolví a Mendoza, pasaron los meses y estuve en condiciones de firmar en cualquier equipo. Entonces arreglé en Provincial que se estaba armando para subir y nos fue bien ese año. Perdimos en la semifinal con Limache, que ascendió junto con Rodelindo Román.

- ¿Ahí pasó a San Antonio?
-Claro, empecé a hacer la pretemporada, pero aún quedaba un tema pendiente con Godoy y, para solucionarlo, me ayudó mucho el presidente del club. Guillermo Lee. Consiguió que me liberaran finalmente los derechos de formación y pude firmar en San Antonio. Tuve una lesión en la rodilla, pero cuando estuve bien jugué más del 80 por ciento de los minutos. Me volví a enfrentar con Concepción en el torneo y, al año siguiente, el técnico Óscar del Solar me llevó al club.
- ¿Es dónde mejor le ha ido?
- El primer año fue difícil, porque salvamos la categoría en la última fecha. Fui el segundo jugador con más minutos y renové automáticamente. Fue difícil porque estuvimos en la zona de descenso, pero después remontamos. Entremedio tuve posibilidades de ir a otros lados, pero me tiró mucho la identidad del club. También el cariño de la gente cuando ve que uno se entrega por completo al margen de cómo te salgan las cosas.
- En 2024 disputaron la final por el ascenso a la B, pero igual la temporada no fue fácil.
- Sí, tuvimos varios técnicos, pero finalmente con el último cuerpo técnico le agarramos la mano y mejoramos. Los resultados quedaron a la vista, no perdimos ningún partido en la segunda rueda y solo empatamos dos. Hoy, el club está donde está por el rendimiento del año pasado.