Un equipo para Alexis
La última temporada fue de sinsabores para Alexis Sánchez. Campeón de Liga con el Inter, aunque su participación fue más cercana a un actor de reparto. Ser parte de un conjunto que termina con la vuelta olímpica es un mérito y desde ese lugar cumplió un rol que era importante para su entrenador, pero sin duda estaba lejos del protagonismo habitual en casi todas sus estaciones.
Pero al igual que el año anterior, en esta misma fecha, el tocopillano no tiene claro su provenir inmediato.
Sánchez se enroló tarde a la rutina competitiva del Inter y quedó la sensación que esa tardanza le pasó la cuenta toda la temporada. Se demoró en regular su condición física con el resto de sus compañeros y eso, en el primer mundo futbolístico, es una ventaja insoslayable. Siempre compitió desde atrás por un puesto y eso se notó.
Alexis ahora espera la Copa América, certamen de alta competencia, que lo encontrará en un buen estado de forma pues estuvo en actividad hasta hace muy poco, sin registrar lesiones graves. Lo que no sabemos es si mientras se desarrolla el certamen ya tendrá claro dónde jugará en la temporada venidera. Esa incertidumbre ojalá no sea un factor negativo en su desempeño. Las incógnitas, muchas veces, conspiran contra el alto rendimiento.
El delantero sigue siendo el futbolista chileno más cotizado en el mercado internacional. Hay buenas noticias con algunos nombres que mostraron regularidad en sus equipo y expectativas con jóvenes, como Darío Osorio, que podrían dar un salto de calidad aún mayor. La Copa América podría servir como trampolín para confirmar ciertos desempeños.
En ese contexto, Sánchez no tiene que demostrar calidad ni jerarquía, sino permanencia y presente. Nadie podría dudar de uno de los mejores futbolistas chilenos de la historia, quizás el jugador más relevante en la historia de la Selección. Pero quizás sea el último certamen continental que encuentre a Sánchez en la órbita de los grandes del Viejo Mundo. Una buena presentación, individual y colectiva, sería una estupenda vitrina para mostrar que puede continuar en las ligas grandes, donde lleva casi 15 años ininterrumpidos.