Las críticas en la UC apuntan a Larraín, Buljubasich y Salas
En el interior de Cruzados no perdonarían un nuevo fracaso deportivo. Las críticas apuntan a quienes rigen actualmente los lineamientos al club.
El ala tradicional de Universidad Católica estaba inquieta desde antes de la caída ante San Luis. Internamente advertían que si el equipo no se coronaba ahora, habría que remecer al club. El lunes 25 se reunieron los Caballeros Cruzados, quienes expusieron su firme apoyo a lo dicho por Alfonso Swett en El Mercurio del domingo.
"Es un error traer extranjeros que vayan a la banca", "Cruzados ha formado planteles para competir, no para ganar", "Católica tiene un estilo de prescindir de los que estuvimos, tiene sus propias ideas y las lleva a cabo" fueron algunas de las frases que molestaron en Cruzados. Su presidente, Luis Larraín, de hecho se marginó de esa cita porque se indignó por lo expresado por el ex presidente del club.
En la cena los comentarios apuntaban a que Católica no aguanta otro fracaso, a que los tiempos tienen vencimiento, y a la preocupación del rector de la casa de estudios. Luis Felipe Gazitúa, ex vicepresidente de la concesionaria en representación de la Fundación, fue uno de los más críticos. Sigue en contacto diario con Larraín y junto con el rector, mira con desconfianza la exposición política del presidente de Cruzados y también director ejecutivo del Instituto Libertad y Desarrollo.
Quien secunda a Larraín en la gestión, José María Buljubasich, también fue centro del cuestionamiento. Su labor la respalda Larraín y pocos más. Cada día es más criticado por los pesos pesados del club.
La llegada de Sebastián Jaime es una contratación que "no se la perdonan al Tati (Buljubasich) por la gran amistad de años que hay entre ellos", comenta un participante. El delantero se embolsa 9 millones al mes y ha jugado solo 191 minutos en el semestre, apenas dos de titular.
El rol de Mario Salas en su arribo, tampoco la comprenden, pues no la objetó. "Es un gasto inútil y hay que aguantarlo por un año", añade otro miembro del cerrado círculo.
Con el resultado en vista y la opción del título que se alejó, la reacción de este núcleo se agudizó. El viernes habrá un festejo por un nuevo aniversario del club. Horas después se sabrá qué equipo levantará la copa. De no ser Católica, el terremoto será fuerte. Internamente no se descarta remover al DT en caso que no renuncie, sacar a Larraín y a Buljubasich. Las aguas están movidas esperando el resultado final.