Fiorina: "En Chile siempre he ido creciendo y progresando"
El delantero argentino ha destacado en la lucha del elenco de Quillota por eludir el descenso. "No venimos mal, pero tampoco como nos gustaría", comenta.
La historia del delantero Alejandro Fiorina comienza en el fútbol chileno en julio del año 2013. Tras formarse en Estudiantes de La Plata, el argentino dejó Central Córdoba, equipo de la tercera división trasandina, y ficho en San Luis de Quillota. Luego pasó por Coquimbo, regresó al cuadro canario y, en la actualidad, es uno de los hombres destacados en la escuadra de la Quinta Región, que lucha por salvarse del descenso.
“No venimos mal, pero tampoco venimos como nos gustaría. Quizás resignamos unos puntos que pueden ser fundamentales para este segundo torneo y mantener así la categoría. De todas maneras, hay que seguir con el temperamento del partido contra Iquique. Ése es el camino”, afirma Fiorina a AS Chile.
En la quinta fecha del Clausura, el espigado atacante (mide 1,91 metros) marcó una dupleta ante los nortinos y fue importante para que San Luis revirtiera, con un jugador menos, el inicio en desventaja en el marcador.
"Como delantero, es importante anotar, pero tampoco me desespera. Lo importantes es que ganemos, que sumemos. Si en lo personal uno puede ayudar es mucho mejor. Me sentí bien en ese partido, pero lo que más me dejó conforme es que todos funcionamos como equipo. Pudimos dar vuelta el partido que tan difícil estaba. Eso fue lo que más conforme me dejó", manifiesta.
-¿Nota un avance en el funcionamiento del equipo, lo cual lógicamente aumentaría las chances de eludir el descenso?
-Sí, seguro. Está claro que hay una mejora. Ante todo estamos siendo más equipo y eso es importante porque en los partidos el equipo llega y marca. Nos da alguna tranquilidad para pensar que el gol va a llegar y mantener también nuestro arco en cero.
-¿Anímicamente cómo están? ¿Sienten que evolucionan hacia el objetivo de salvarse?
-Sí, estamos convencidos de eso. Queremos ratificarlo en los partidos que nos quedan, serán rivales difíciles también. Estamos convencidos.
-Usted y su compañero de ataque Carlos Escobar corren harto en la cancha. ¿Qué le pide el DT Miguel Ramírez específicamente?
-Nos pide que nos complementemos con Carlos. Que si uno recibe de espalda, el otro pique al espacio. Después, cuando vamos los dos arriba a disputar el balón, que nos coordinemos bien: que uno vaya al primer palo y otro al segundo. Son cuestiones que manejan los delanteros. Con Carlos, gracias a Dios nos entendemos muy bien y nos llevamos muy bien también.
-Por su estatura, el juicio rápido es que el aspecto fuerte de su juego es la faceta aérea. ¿Es tan así?
-No tanto. A mí me gusta jugar más por abajo que por arriba. Ha sido así toda la vida, es una cuestión natural mía.
-¿Qué balance haces de estos años en el fútbol chileno?
-Es muy positivo, porque siempre he ido creciendo y progresando. Ahora, estando en Primera División, las cosas son más exigentes. Pero creo que he podido desempeñar un buen papel. Espero seguir mejorando y creciendo. Por ahí se deja jugar un poco más y no es tan físico como en la B.
-Esa laxitud defensiva claramente es más favorable para los que actúan en el ataque.
-Sí, claro. Se favorece el juego y también los árbitros ayudan a eso. Yo en lo personal me siento más cómodo. Mis expectativas a corto plazo son que San Luis se quede en Primera. Después yo a este club le tengo un gran cariño y lo aprecio, pero obviamente que uno siempre quiere crecer como profesional. Si las cosas se dan, bien, sino se verá, pero la idea es seguir acá.
-Parece que se adaptó a la Quinta Región junto a su mujer (María Fernanda) y su hija (Emilia).
-Sí, es una zona bonita. Quillota es una ciudad relativamente chica y tranquila. Está cerca de varios lugares lindos. Nos sentimos bien acá. Cuando viene la familia a visitarnos o los amigos, vamos a dar una vuelta la costa, a Viña del Mar, o también a Santiago. Aprovechamos lo lindo del país.