Mario Salas: "Ahora ser de la Católica es ser ganador"
El entrenador bicampeón repasa el 2016 y dice que hace falta un cambio general del medio para desarrollar nuestro fútbol.Colo Colo - Universidad de Chile: Torneo Transición
Transformar es una de las palabras favoritas de Mario Salas. Y eso es lo que ha hecho en estos dos años en Universidad Católica. Inéditamente este año alzó tres copas y logró el primer bicampeonato de la historia. Lo hizo con el mayor puntaje acumulado y con más goles a lo largo del 2016. Indiscutible.
El paso de las horas le ha ayudado a dimensionar los logros alcanzados, pero siente que deberá pasar mucho tiempo para entender en qué lugar de la historia quedó. Así lo refleja en entrevista con AS Chile, en la que repasa el momento de su exitosa carrera. “Primero hay un estado de shock donde valoras el bicampeonato. Después, con el correr del tiempo y de los años, podré valorar cómo entramos en la historia de este club”.
-¿Pudo festejar más este título que el Clausura?
“Lo he disfrutado más que el anterior. Todavía estoy como en ese estado de shock, no he bajado. La gente en las calles me recuerda lo valioso que es lo que logramos. Eso me ayuda”.
-¿Qué tan diferente fueron ambos?
“El otro torneo fue más de catarsis. Este ha sido ‘el’ campeonato. El otro fue sacarse la rabia de no haberlo podido lograr antes, influyó en cómo se dio también”.
-Si le pidiera un nombre por el que su equipo comienza, ¿cuál diría?
“Hay muchos. No te podría decir uno. Este equipo tuvo una virtud que fue el sostén, el andamiaje y la fuerza colectiva. Más allá de rendimientos individuales notables como el de (Nicolás) Castillo, (Diego) Buonanotte, José Pedro (Fuenzalida), Guillermo (Maripán), Germán (Lanaro)…¡Te empiezo a nombrar a todos!”
-Y en lo emocional, ¿quién o quiénes fueron el pilar?
“Ahí también hay un grupo fuerte de liderazgo. Están Franco (Costanzo), (Cristián) Álvarez, Milovan (Mirosevic), José Pedro (Fuenzalida), Germán (Lanaro), Sebastián (Jaime), Diego (Buonanotte), Roberto (Gutiérrez), Cristopher (Toselli)…”
-Buonanotte dijo que usted ha sido como un padre para él…
“(Sonríe) No me considero un padre. Para mí es un halago porque la figura del padre es máxima. Sé que se refiere más a un tema futbolístico. No me considero un padre, sí una persona que trata de formar, de transformar”.
-Usted siempre ha hablado de preocuparse de la persona y no solo del futbolista. ¿A eso va?
“Es que es un poco hacia donde apunta el liderazgo. Es súper importante preocuparse por el jugador, no sólo la parte futbolística. Siempre hablo de “transformar”. El liderazgo o la capacidad de los técnicos de poder influir en los jugadores es algo que va más allá de de lo futbolístico, pero a través del fútbol. Se pueden enseñar valores, principios, se puede transformar la forma de actuar, de pensar, la actitud que tienen frente a las cosas. Hay jugadores con los que resulta, otros con los que no. Lo hacemos con todos, más allá de las personalidad que tenga cada uno”.
-¿Se ha decepcionado?
“No, eso sí, trato de no apartar. Intento incluir, siempre. Si me cuesta que no sea porque mi actitud me lleva a despreocuparme de él. Hay veces que resulta y otras en que no".
-Su crianza en el rugby amateur y como seleccionado, ¿cuánto le sirvió?
“Harto. Como deporte no profesional, tiene valores por su espíritu amateur que se han mantenido. La disciplina, el respeto por el rival, por el árbitro, generar liderazgos, darle autonomía al jugador para que tome decisiones dentro y fuera del campo. Eso último para nosotros los entrenadores es terrible porque siempre tenemos temor de que los jugadores se pasen de rosca y ocurran cosas no positivas. El rugby es la base de muchas otras cosas. Sigo viendo partidos de rugby, converso con DTs que son amigos míos. En rigor, me sigo compenetrando y llenándome de ideas del rugby”.
-Uno de esos valores se contraponía a las expulsiones de las que usted fue víctima. ¿Recapacitó?
“Es parte del crecimiento. Puede que mañana me vuelvan a expulsar. Al final uno capta ciertas cosas porque cuando te expulsan, no puedes estar presente en el momento en que te necesita más tu gente, no estar ni ser parte ni aportar tu grano de arena. Es algo que no genera nada positivo. Son cosas que tratamos de arreglar, de mejorar, al parecer este campeonato pasamos invicto…(sonríe).
De los rótulos y renovaciones
-Siempre ha hecho hincapié en que la Católica no fracasa, en que el equipo pelea hasta el final. ¿Siente que derribó el discurso de 'equipo segundón'?
“Esa idea no es solo mía, es de la institución. Y es que no ha sido cierto. Veo que hay un equipo que pelea todos los campeonatos y ¡es difícil pelear todo! O pregúntale a los demás grandes de este país. Siempre debe haber un solo ganador”.
-¿Debe cambiar la mentalidad del medio?
“No sé. Debe cambiar la percepción del medio, sobretodo del medio sobre la Católica. Ahora se podría decir perfectamente que ser hincha de la UC es ser ganador. Lo realmente importante es hacer todo lo posible y prepararse para ganar. Es tremendamente importante cómo lo haces. Hay que ser consciente de que en algún momento las cosas no se te van a dar, ahí tienes que tener como horizonte ir por más, desarrollarte y ser cada día mejor”.
-El objetivo de ahora es ir por el Tricampeonato y la Libertadores.
“Siempre he tenido el gusto por los campeonatos. Eso hay que conversarlo con la dirigencia. Establecer objetivos no es fácil, significa hacer muchas cosas con la intención de ser el mejor y hay que ser coherente con esa idea. Iremos por otro campeonato nacional. En el área internacional, veremos qué hacemos”.
-En marzo de 2015, Católica igualó 3 a 3 con Iquique después de ir ganando 3 a 0. ¿Cuánto le sirvió ese partido para retocar su postura táctica?
"No hemos cambiado la idea de tratar de hacer un gol más que el rival, y de ganarlos. Sí te vas dando cuenta de cosas. Hicimos análisis de los goles recibidos, de los partidos que perdimos entre esos el de Iquique. Seguimos con la idea de ser un equipo protagonista, pero también tenemos la idea de ganar y de ser campeones. En algún momento llegamos a tener algunos matices, el fundamental pasaba por determinar cuál era nuestra posición de equilibrio cuando teníamos el balón que era lo que más problema nos generaba en Católica. Logramos entender lo que nos pasaba en la UC. Ahí empezamos a estar mejor posicionados y a recuperar la pelota más cerca del arco rival para tener más posibilidades de tener acciones ofensivas”.
-¿Cuándo ocurrió esto?
“Con el correr del tiempo. Ese fue un partido importante y hubo otros. Todo requiere tiempo, un proceso. En este torneo fuimos la segunda valla menos batida, el equipo más goleador, con más diferencia de goles, más sumatoria anual. Fuimos transformando y matizando algunas cosas. Y lo mismo nos va a pasar ahora. Sería muy malo que en una posición de victoria, nos quedáramos con lo que tenemos. Tenemos que seguir creciendo como cuerpo técnico, como equipo, no podemos quedarnos inmóviles”.
-¿Cómo se logró reponer de la eliminación en la Sudamericana?
“Fue fuerte, no hicimos las cosas para quedar eliminados y quedamos. El fútbol no te permite llorar mucho, rápidamente tienes que dar vuelta la página”.
-¿En esos momentos aparecen los amigos?
“Siempre. Dentro del fútbol, tengo la suerte de tener varios. Y también fuera”.
-¿Pablo Guede es uno de ellos?
“Es un profesional que estimo mucho. Lo que tiene, lo ha obtenido en base mucho esfuerzo y trabajo. Lo admiro mucho profesionalmente”.
"Los procesos no existen"
-¿Qué DTs de proyección ve en Chile?
“Varios. Más que el tema de la edad, cuento a los que están iniciándose. Nico (Córdova), Miguel Ramírez, (Miguel) Riffo, (Miguel) Ponce, (Francisco) Bozán, (Víctor) Rivero, (Erwin) Durán, César Bravo. Hay muy buenos técnicos chilenos que mañana darán qué hablar. Y también destaco a otros como (Emiliano) Astorga en San Marcos, (Luis) Marcoleta en Curicó, “Clavito” en el Chago Hay mucho que resaltar.
-Usted es de los pocos técnicos que ha superado los dos años dirigiendo, el otro había sido Jorge Pellicer. ¿Una rareza?
“Los procesos no existen. Acá caemos en esta dinámica de que si no logras algo, no sirves. Las cosas no son así. No todo es desechable en la vida. De repente hay que creer, hay que hacer las cosas por convicción. Si contrato a un DT debe ser por convicción y tengo que saber claramente qué me puede entregar, y lo respaldo y estoy con él en los momentos difíciles”.
-¿Es factible esperar en Chile una carrera como la de Alex Ferguson en el Manchester United?
“En Chile es difícil. Eso significa no tener solo en mente los resultados. Si te fijas en (Arsene) Wenger en el Arsenal, no ha obtenido buenos resultados pero a él se le valoran otras cosas. No sé si nuestro país es capaz de valorar cosas extremadamente importante como la forma de actuar, de hacer crecer una institución, de desarrollar a los jugadores, de hacerse parte de las políticas deportivas de un club...No sé si hay clubes que tengan políticas deportivas, una visión, una misión. No sé si hay clubes que estén conformados profundamente. Eso nos significaría tener mejores instituciones y mejores propuestas futbolísticas”.
-¿Hay una falta de madurez del medio?
“En general, sí. Es innegable que nos falta mucho por crecer. Cuando vemos esto solo como un negocio, como una cuestión para generar divisas, nos vamos a la cresta. Tenemos que tratar de desarrollar y profundizar en todos los aspectos del fútbol y las instituciones”.
-¿Ve un futuro muy negro?
“Hay clubes que marcan cierta tendencia. Veo la realidad de Católica. Entiendo que uno se meta al fútbol por lucas, lo tengo súper claro. Tampoco me voy a hacer el místico ni alguien que no entiende lo que está pasando. Pero también entiendo que cuando uno desarrolla y empieza a trabajar en un club y genera políticas, principios, un plan estratégico; vas a poder sumar más recursos económicos que trabajando a corto plazo. Con ideas claras, con una base que te permita el desarrollo de esa institución para el mejor andar del equipo, así creo que nuestro desarrollo futbolístico sería mucho mejor”.