El tahitiano que revolucionó el Maui and Sons Pro Arica Tour
El tahitiano Mihimana Braye se ubicó entre los cuatro mejores del certamen. Además, se ganó al público por su carisma y cercanía con los fans.
Aún quedan historias por recordar del Maui and Sons Pro Arica Tour, certamen realizado en el norte de nuestro país. Una de ellas es la de Mihimana Braye, quien cayó en semifinales ante el campeón del torneo, Nolan Rapoza. El tahitiano, a pesar de no ganar el trofeo, sí se quedó con el cariño del público ariqueño. ¿Cómo lo logró? De la siguiente manera.
El tahitiano llegó cuatro días antes para ambientarse a la peligrosa rompiente y desde ese entonces se ganó el corazón del público. Previo a sus mangas, animó todo el sector de los competidores y toda la tarima con sus pasos de baile al ritmo de Bad Bunny. El isleño nunca soltó su parlante rosado que era casi del porte de un ladrillo. Además, su gran dominio del español, le permitió lograr cercanía con los fanáticos que se tomaban fotos con él.
“Mihimana es un tipo muy alegre. Siempre está con una sonrisa y es muy educado. Además, en el agua surfea increíble. Tiene toda la escuela de Tahiti para entubar”, describe el local Cristopher Herold, quien quedó eliminado en la primera ronda de la ola que corre casi todos los días.
Herold fue una gran ayuda para el polinésico al momento de enfrentar los días finales. Él le contó los secretos de El Gringo para estar a salvo y no pasar temores ni nerviosismos en la onda que el último día de competencia lanzó bombas de casi 5 metros de altura.
“El Gringo es una ola que da mucho miedo. Es parecido a Teahupoo pero las rocas están ahí mismo. Es muy peligrosa, pero es espectacular”, contó el mismo tahitiano tras recibir el premio por el cuarto lugar.
“Voy a volver de todas maneras. Me encantaron las empanadas y los mariscales”, declaró al final.
Braye se ganó el corazón del Gringo a punta de tubos y el de todos los ariqueños gracias a sus dotes de bailarín. Su presencia para el próximo año, está casi garantizada.