El extraño caso de Gabriel Vargas

Gabriel Vargas ha sido uno de los goleadores más confiables de los últimos años. De hecho, es el segundo máximo artillero en actividad del fútbol chileno tras Esteban Paredes, aunque durante este torneo ha lidiado con una dura realidad: vive su peor sequía en 16 años.

En el actual campeonato con Curicó lleva 17 partidos sin anotar y supera lo que vivió en el Clausura del 2002. En aquel momento iniciaba su carrera en Deportes Concepción y estuvo 16 encuentros sin convertir.

Después de eso, anotó al menos un gol hasta el Transición 2017, cuando tras regresar de Patronato de Argentina a Curicó, estuvo 11 encuentros sin festejar. Antes, en el Apertura 2016 tampoco anotó, pero sólo jugó un partido antes de partir al fútbol transandino.

En contraste, sus mejores momentos los vivió en Cobresal y la U. de Concepción, donde anotó 12 veces. En el 2018 jugó 26 partidos e hizo nueve goles.