El draft de Segunda genera la primera controversia de Milad
El nuevo presidente del fútbol chileno anunció las propuestas que podrían dar un giro a la tercera categoría. El gerente de Recoleta se refiere al tema.
La precariedad es quizás el mejor término que define a la Segunda División. La categoría, creada el 2011 bajo la administración de Sergio Jadue, ha tenido múltiples historias de sacrificios y necesidades. La pelea por alcanzar la profesionalización ahora sumará otro capítulo, tras la victoria de Pablo Milad como presidente de la ANFP.
“Está claro que esta categoría no ha sido considerada y queremos cambiar eso”, asegura el ex Intendente, quien propone un “draft de jugadores para que puedan participar en Segunda División y sean financiados por clubes de Primera A y Primera B”.
El programa propuesto por Milad antes de la elección también definió que la categoría sería Sub 23 (con las excepciones establecidas): “Cuando se creó, la idea era que jugaran los futbolistas que no tenían el tiempo en sus clubes, para potenciar el ritmo de las series menores”, afirma el nuevo mandamás del fútbol chileno.
Sin embargo, la idea generó un rechazo inmediato. Álvaro Vial, gerente general de Recoleta y uno de los dirigentes más activos en las negociaciones por la Segunda División, respondió: “No estoy de acuerdo, eso atenta contra la idea de tener algo de patrimonio”, dijo a As.
“Tener planteles Sub 23, en una división que no tiene recursos para desarrollar divisiones inferiores, nos condena a tener jugadores ajenos. Porque hasta los 23 años debes pagar los derechos de formación. Esto acentúa la desigualdad”, agrega Vial. “Cuando la división es Sub 25, al menos puedes tener jugadores entre 23 y 25 años”.
Pablo Milad se reunió con los clubes de Segunda División un día después de anunciar que sería candidato a la presidencia de la ANFP. Allí también prometió búsqueda de auspicios, participación en el Consejo de Presidentes (dos veces al año) y compensación de gastos de viajes y hoteles.
Álvaro Vial responde: “Yo leí su programa y lo único positivo es su intención de colaborar. En la reunión me parece que tiene una buena visión del fútbol. Pero ninguna medida es tan acorde a nuestra realidad institucional. No va en la línea de nuestros intereses”, señala.
¿Por qué?: “No queremos trato especial, queremos acceder a los mismos derechos, en proporción. Acá hay discriminación. No me parece justo que algunos clubes valgan dos votos, y otro uno. Aun así, estamos dispuestos a valer medio. Pero la ANFP algún día tendrá que adaptarse a una asamblea igualitaria de socios, y eso hoy está en análisis jurídico”.