Colo Colo tropieza en la agonía y su pesadilla llega al límite

Durante la presente temporada, Colo Colo ha vivido en un pantano. El riesgo de caer por primera vez a la B ha golpeado a diario al club y sus hinchas, y se trata de una pesadilla que, de momento, seguirá. O’Higgins le igualó en el último minuto del partido (1-1) y, por ello, los albos deberán jugar el partido por la permanencia el próximo miércoles. Nadie lo pensaba, pero es una realidad.

El Cacique inició con actitud y rápidamente lo hizo notar tras situarse en campo contrario. Como ha sido costumbre durante los últimos partidos, Solari inquietó por la derecha, un sector cubierto entre Cereceda y Fracchia. Sin embargo, con el paso de los minutos, O'Higgins se asentó en su cancha, comenzó a controlar el balón y apostó por la búsqueda a las espaldas de Suazo. Castro, también veloz, lo incomodó.

Justamente de los pies del extremo uruguayo llegó la primera opción de gol. A los 15', luego de un rebote que dejó Larrondo, Castro sacó un potente disparo de derecha. No obstante, el balón se fue desviado. Minutos más tarde, Coquimbo abrió la cuenta en otro duelo clave para Colo Colo, que hasta ahí aseguraba su permanencia en Primera División. En su compromiso, los albos comenzaron a aproximarse al área de Batalla a los 31'.

Solari avanzó por el centro, eludió a un par de rivales, pero su disparo fue bloqueado por uno de los centrales del Capo de Provincia. Aunque no fue lo único. Hubo una más clara: Morales desvió un buscapié de Suazo y la pelota se fue muy cerca. El escaso tiempo en el que Colo Colo visitó por duplicado el arco contrario hacía pensar que el trámite daría un vuelco. Pero nada de eso ocurrió. Es más, el partido se llenó de amarillas y, en ese contexto, Larrondo recibió la segunda y debió marcharse de la cancha de El Teniente.

Justo sobre el final de la etapa inicial, Palestino le empató a Coquimbo. El resultado, cómo no, perjudicaba a Colo Colo, a esa altura destinado al partido de definición. Quinteros lo debe haber conversado con sus pupilos en el vestuario y, por lo mismo, quiso revertir la situación: sacó a Valencia, hoy nuevamente muy opaco, y dispuso el ingreso de Bolados. El ex UC respondió de inmediato.

A los 46' envió un centro desde la derecha, que no pudo ser conectado por Morales, pero sí por Fuentes, quien en la entrada del área derrotó a Batalla. El delirio fue total. Tal como si Colo Colo hubiese conseguido un nuevo título. Y la felicidad pudo haber llegado a su peak un minuto después. No obstante, a Bolados le anularon un tanto por posición de adelanto de Morales.

Pese a la superioridad numérica, O'Higgins buscó responder. Porque, claro, los de Rancagua podían optar a una plaza internacional. Y lo intentaron mediante balón detenido y dándole libertad en la proyección a los laterales (Fracchia, principalmente). Sin embargo, les costó bastante. El juego de Colo Colo no fue a las mil maravillas, pero en la zaga Barroso y Falcón no tuvieron mayores problemas.

Lo que sí resultó ser un drama para Quinteros fue la expulsión de Bolados (72'). A instancias del VAR, Tobar lo sacó de la cancha por una fuerte infracción sobre Cereceda. La situación, era que no, hizo que Colo Colo retroceda y se refugie. Incluso, que tire pelotazos para poder respirar, pese a que Quinteros pedía que tengan el balón. Para eso fue que Matías y Alarcón ingresaron a la cancha.

Pero la tendencia no cambió. Así se mantuvo hasta el cierre, donde O'Higgins metió miedo. A los 80', Alarcón disparó potente de media distancia, pero el balón se fue a las manos de Cortés. Aunque luego, a los 85', Gutiérrez paralizó todo. Tras un centro medido de Castro, el Pájaro falló en una posición inmejorable, al igual que Cahais a los 91'. Sin embargo, a los 90+5' el mundo se derrumbó para Colo Colo.

Matías perdió la pelota en la mitad de la cancha, y en la entrada del área Falcón bajó a Gutiérrez. Tobar cobró penal y Alarcón no falló. Colo Colo deberá jugar el partido por la permanencia, el próximo miércoles, frente a la Universidad de Concepción (18 horas). Será un día en donde los albos podrían conocer el infierno.