UNIVERSIDAD DE CHILE
Los 3 grandes problemas de la U con miras al Superclásico
Los azules visitarán a Colo Colo sin todavía haber aclarado algunas incertezas en su juego. Antes, derrotaron a Unión Española, pero dejando varias dudas.
Universidad de Chile venció a Unión Española en el cierre de la cuarta fecha del Campeonato Nacional y llega con el ánimo repuesto a enfrentar a Colo Colo en el Monumental. Los azules reaccionaron en el segundo tiempo, tras haber sido superados en la fracción inicial, para quedarse con la victoria en El Teniente de Rancagua. Ahora, la escuadra dirigida por Rafael Dudamel afronta el desafío de lograr un resultado favorable en el Superclásico y el DT podría quedar en la historia luego de dos décadas sin triunfos de visita.
Sin embargo, las dudas persisten en relación al funcionamiento colectivo del elenco estudiantil. Ante Unión, sus oponentes dominaron sin contrapeso y contaron con claras opciones para abrir el marcador, pero Fernando de Paul con excelentes atajadas impidió las conquistas. Al final, el cuadro azul mejoró notoriamente en el complemento, con la inclusión de Joaquín Larrivery, y eso le bastó para vencer. De todas formas, la repetición de tres inconvenientes de funcionamiento general seguramente mantienen en alerta a los universitarios de cara a visitar a Colo Colo.
Inconsistencia ofensiva
La U es un equipo que no ataca mucho y, cuando lo consigue, normalmente las llegadas no revisten gran peligro para el rival. Luego de la fecha libre en el inicio del torneo, Dudamel comenzó la temporada del fútbol local con Larrivey en el eje ofensivo. Sin embargo, la confianza del DT en el desempeño del ariete argentino solo duró 56 minutos en el empate 1-1 ante Huachipato, pues en ese instante fue sustituido. Durante ese encuentro, los azules atacaron poco y fue Ángelo Henríquez quien terminó el partido en la posición de '9' y así pudo anotar el tanto de la paridad.
Contra La Serena, Dudamel confío en el chileno como piloto de ataque, pero la productividad ofensiva se mantuvo baja. Luego, en el triunfo ante Unión, el equipo se volcó sobre el arco de Diego Sánchez en la recta inicial de la segunda parte y Larrivey (recién ingresado) pudo anotar, abriendo el camino hacia la victoria. Este lapso del partido en El Teniente ha sido lo mejor en ataque de la U en 2021: tuvo generación de juego desde el mediocampo por el accionar de Gonzalo Espinoza y Marcelo Cañete e intervenciones trascendentes, por propia cuenta, de los tres de arriba (Thomas Rodríguez, Larrivey y Henríquez). Esto no había ocurrido con anterioridad, dejando en evidencia sus carencias para atacar eficazmente.
Cambio de laterales
En el fútbol actual, el rol de los laterales en el funcionamiento colectivo es de suma importancia y Dudamel se propuso hacer un giro en ambas posiciones para el 2021. Jean Beausejour y Matías Rodríguez se marcharon para cambiar de aire en esa zona de la defensa y también porque la sensación de fin de ciclo de ambos referentes se tornaba ineludible. Sin embargo, las respuestas de sus reemplazantes (Yonathan Andía y Marcelo Morales) aún no son las esperadas. El cuadro azul adolece de una salida fluida y limpia por los costados y tampoco exhibe profundidad ofensiva por los avances de los laterales.
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Andía solo ha dado indicios del jugador penetrante y de ida y vuelta de La Calera en 2020. Ausente en los primeros partidos del año, el lateral derecho paulatinamente va recuperando el nivel que incluso le permitió llegar a la Roja. De todas maneras, su participación en el juego por los costados de la U no presenta la dominancia aguardada, aunque ahora la proximidad de Rodríguez (compañero de asociaciones en La Calera) puede modificar su panorama. Por el sector izquierdo, Dudamel parece haberse inclinado por la titularidad del juvenil Marcelo Morales. Es un lateral neto, que conoce el puesto, pero en su estreno absoluto en Primera División se ha volcado esencialmente a cumplir en el plano defensivo.
La intermitencia de Cañete
El ex volante de Cobresal es sin duda la principal apuesta de la U en 2021 y llegó con argumentos de sobra para generar esas expectativas. El volante ofensivo fue uno de los mejores jugadores de la temporada pasada, forjando un perfil de mediocampista ultra creativo, inasible para la marca rival, con visión de juego precisa para asistir y apariciones en el área creando peligro. De todo esto, algo mostró en el triunfo ante Unión, presentación que selló con un gol de gran jerarquía. Sin embargo, durante el primer tiempo estuvo ausente, con intentos repetitivos e infructuosos de apoyos de ruptura, tal como en La Serena.
Probablemente, el nivel del volante es producto también del contexto de funcionamiento del equipo. En muchas ocasiones, el balón no le llega con comodidad ni con ventaja. Por muy buena técnica individual que posea, igual parte con una desventaja para maniobrar bajo presión y espacios mucho más reducidos que en su etapa en Cobresal. Da toda la impresión de que está afrontando con algo de severidad el proceso de adaptación a un equipo grande, bajo marcas más estrechas, menos tiempo para resolver y bloques de presión rival bajos y que no conceden facilidades. Aun así, registra una asistencia y un gol en 2021 con los azules, pero su aporte ha sido solo episódico. En quien debe manejar la generación de juego de la U, evidentemente que esas marcas se vislumbran insuficientes.