LA ROJA
La inconsistencia de Pulgar
El volante de la Roja vivió dos realidades durante los 90 minutos que estuvo dentro del campo de juego en el encuentro entre la selección y Colombia.
Chile cayó frente a Colombia en su visita a Barranquilla y quedó muy mal aspectado en la lucha por a la Copa del Mundo que se jugará el próximo año en Qatar. Un muy mal primer tiempo condicionó a la Roja, que intentó reaccionar en el segundo tiempo, pero que en definitiva se fundió tras el tercer gol cafetero.
Uno que ha transitado por la regularidad en los últimos años es Erick Pulgar, que si bien no exhibe rendimientos espectaculares, tampoco suele aparecer entre los rendimientos más bajos. Y en el Metropolitano de Barranquilla convivió con buenas y malas.
Y es comenzó perdido. Jugando por delante de la línea defensiva junto a Claudio Baeza, parecieron nunca coordinarse con las marcas y los respectivos relevos. A Pulgar le costó encontrar un lugar en la cancha y pareció recién acomodarse cuando Colombia ya ganaba 2 a 0.
Ahí, alternó entregas buenas y malas, pero sin lograr gravitar. Las pocas pelotas que recibió en campo propio para comenzar la salida, por lo general, terminaron siendo pases laterales, aunque por supuesto esto no es exclusiva responsabilidad del jugador de la Fiorentina.
En el segundo tiempo, en cambio, pareció ingresar otro Pulgar. Con el ingreso de Charles Aránguiz, el "Príncipe" y Arturo Vidal fueron interiores y Pulgar quedó como volante defensivo a la hora de defender. Esto cambiaba cuando Chile atacaba e intentaba empezar a elaborar la jugada: Aránguiz se recogía para ser la primera salida, Pulgar buscaba espacios y Vidal se acercaba a Luis Jiménez (a esa altura la referencia de ataque del equipo).
Y precisamente cuando Aránguiz se encargó de empezar las jugadas, Pulgar se vio mejor. Así tuvo un remate de zurda en la primera gran jugada colectiva de la Roja en el segundo tiempo y, también con libertad, capturó el rebote de David Ospina para terminar habilitando a Jean Meneses en el gol chileno.
Si bien fue un partido ingrato para Chile, el volante fue de menos a más y terminó encontrando la posición en campo rival donde más cómodo se sintió, con una libertad que muchas veces también tiene en su club, pero que no siempre ha tenido en la selección.