Representantes, venta del club en 2022 y campaña de desprestigio: la carta de Azul Azul a la U
El actual presidente Michael Clark respondió al rector de la U, y despejó algunas dudas que han rondado desde el silencioso arribo de los nuevos dueños.
La silenciosa dirigencia de Azul Azul aprovechó una carta enviada al rector de Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, para sacar la voz. En ella, además de intentar resolver la duda principal sobre quiénes están detrás de la actual administración, también aprovecharon de acusar una campaña de desprestigio.
"La situación de crisis, como usted la denomina, es precisamente aquella con que la administración que me corresponde encabezar se ha encontrado al asumir la dirección de Azul Azul S.A", dice parte de la carta de respuesta de Michael Clark.
Además de dar detalles de la grave crisis económica que vive el club desde la administración de Carlos Heller, agrega. "No podemos compartir su apreciación de que los problemas en la conducción del club tengan relación con la forma como se distribuye la propiedad. Al contrario, creemos que tiene que ver con la forma en que se han tomado las decisiones del club en los últimos años, y el modelo de gestión que ha seguido la institución.
¿Tiene relación Fernando Felicevich con Azul Azul?
Sobre las dudas de la participación de representantes de jugadores como Fernando Felicevich, la respuesta de Azul Azul fue la siguiente. "No hay representantes, agentes o intermediarios de jugadores, ni dueños o partícipes en otros clubes de fútbol -chilenos o extranjeros- que formen parte -de manera directa o indirecta- de la propiedad del Fondo de Inversión Privado Tactical Sport o de la gestión de dicho fondo o del Club Universidad de Chile.
¿Se plantea vender el club en 2022?
"Se ha difundido información falsa sobre un supuesto cambio de propiedad que se produciría en marzo o abril de 2022. Sartor ha descartado de plano que esté contemplando o haya contemplado aquella posibilidad.
Campaña de desprestigio
"Se ha instalado una campaña de desprestigio, mentiras y descalificaciones, orquestada por las mismas personas que resultan ser los verdaderos responsables de la actual crisis del Club Universidad de Chile, los que han instalado una posverdad consistente en que la información sobre la propiedad del Club no está y no ha estado disponible, y atribuyéndole participación en la propiedad y en la toma de decisiones del Club a terceros totalmente ajenos al mismo y que nada tienen que ver con él".