Jugó en la Selección y ahora es candidata a diputada: "El deporte no puede depender del esfuerzo familiar"

- ¿Qué recuerda de ese periodo en la selección de básquetbol?
- Fue un sueño cumplido, porque aprendí mucho. Ha sido una de las cosas más lindas que me ha pasado en la vida. Son pocas las personas que llegan a una Selección teniendo la vida arreglada. Habían muchas jugadoras como yo que, además de estudiar, tenían que trabajar. Hay muchos obstáculos y para las mujeres es el doble. Fue un tiempo de sacrificio personal que ojalá vaya disminuyendo con el tiempo. Por eso estoy en política. Ojalá el deporte nunca más dependa del esfuerzo individual o familiar. Necesitamos un apoyo más concreto y profesionalizado por parte de las federaciones para que los talentos puedan desarrollarse sin problemas.

- ¿Continúa jugando básquetbol?
- Desde que entré a la Universidad de Chile (a estudiar), tuve un par de años de compatibilización entre la selección chilena y la selección universitaria, pero tuve que renunciar a la primera. Uno no puede ser súper heroína y tenía mucha carga. Pero me mantuve unos diez años con la camiseta de la U. De hecho, este año también podía ser seleccionada porque me quedaba un año de gracia, pero no pude por la campaña. Ahora está el básquetbol 3x3 y hace unos años se reconoció como un deporte olímpico. Las ex estudiantes de la Universidad de Chile formamos un equipo, así que estoy jugando bastante frecuente. Es una modalidad rápida y tiene reglas distintas. Me he mantenido activa.

- En sus redes sociales también se ve cercana al ciclismo...
- Como dejé de jugar básquetbol en la campaña, sentía que debía reemplazarlo con algo. Todos los deportes colectivos requieren mucho tiempo en la organización, así que asumí que tengo 29 años y que debía empezar a buscar otro deporte (ríe). No soy una ciclista 100 por ciento, porque me queda mucho por aprender, pero he estado en ese mundo. Fui de esas personas que utilizó la franja deportiva en pandemia y empecé a subir el cerro en bicicleta, así que es mi nuevo pasatiempo. También lo utilizamos en la campaña.

- ¿De qué forma?
- Mi jefa de campaña utiliza las bicicletas cargo para transportar los materiales y el equipo en general ha sido muy consciente. Si nos proponemos cuidar el medioambiente, necesitamos acciones concretas. Llevamos más de 1.200 kilómetros recorridos en esta campaña, así que estamos contentos con la reducción de emisiones que hemos contribuido. El distrito tiene seis comunas y evidentemente que hay distancias más largas que otras, pero tratamos de movernos en bicicleta lo que más podemos. La manera más sustentable posible.

- Su lema es 'Cambiemos el juego'. ¿De qué forma conecta su campaña política con el deporte?
- Yo voy en reemplazo de Giorgio Jackson, que es el diputado que mi partido tiene en el distrito 10. Él no da un paso al costado porque no pueda elegirse de nuevo, es porque tenemos la convicción de que el recambio en la política tiene algo colectivo. No vemos esto como una carrera individual. Cuando pensamos en el lema de campaña, lo ligamos a mi experiencia deportiva. Así entiendo la política. Jugamos en distintos roles según el momento que nos toca y también tenemos que estar disponible a hacer el cambio en el equipo cuando corresponda.

- ¿Qué le gustaría aportar desde el Congreso en materia deportiva?
- Lo primero es que funcione la legislación. Desde el 2014 hay 30 proyectos de ley que están parados en el Congreso, y por lo tanto creo que el deporte nunca ha sido una prioridad. Nosotros esperamos que el deporte esté garantizado como derecho fundamental en la Nueva Constitución, cosa que está avanzando, y vamos a poner el pie en el acelerador y elaborar leyes por primera vez. Con estos proyectos detenidos, de deporte se ha hablado muy poco. También vamos a ver la política deportiva que fue presentada por Natalia Riffo en el segundo gobierno de Michelle Bachelet.

- ¿A qué se refiere?
- Esa política plantea algunos puntos importantes, pero que no han sido tomados. Por ejemplo, en relación a cómo concebimos la práctica de actividad física a nivel local y cómo vinculamos una ley que entregue facultades a los municipios para que exista una conexión con los colegios. Hace poco se autorizó a que se disminuyeran las horas de educación física en la malla curricular de los estudiantes y eso no puede ser. También tenemos propuestas para disminuir la brecha entre hombres y mujeres, y revisar lo que está haciendo la Anjuff porque mi compañera Iona Rothfeld hace un trabajo importante para visibilizar las condiciones laborales de las mujeres deportistas.

- ¿Como los contratos de trabajos en el fútbol femenino?
- Claro, no puede ser que en el siglo XXI tengamos jugadoras profesionales que estén sin contrato.

- ¿Por qué no se lleva a cabo la política deportiva?
- Tuvimos una conversación muy interesante con Natalia (Riffo) y la lectura que ella hace es que para que una política deportiva funcione se necesita un compromiso intersectorial del Estado. Se refiere a que no puedes relegar el empuje de una política solo desde la visión de los deportistas, debe trascender al Ministerio de Salud, al Ministerio de Educación y al Ministerio de Desarrollo Social, por ejemplo. Y mientras eso no pase, es bien difícil empujar algo tan transformador para la vida de las personas. Hay una traba de paradigma.

- El programa de Apruebo Dignidad propone contrato de trabajo a los deportistas de alto rendimiento. ¿Es viable?
- El deporte de alto rendimiento es una dedicación 24/7. Es un trabajo al que uno se dedica de manera profesional, igual que todos los trabajadores de Chile. Por lo tanto, es insólito. Yo tuve que renunciar a ser seleccionada chilena porque no podía compatibilizarlo con el resto de mis tareas. Entonces no puede ser que alguien tenga que escoger entre trabajar o ser deportista de alto rendimiento, o que incluso haya deserción en deportistas porque no tienen los recursos. Si efectivamente queremos que el deporte sea reconocido a nivel latinoamericano, tenemos que ver las condiciones de los deportistas. Hace unas semanas me invitaron a entrenar con la Selección de fútbol amputado. Hay desigualdad enorme.

- ¿Qué pudo detectar en esa actividad?
- Que ellos no tienen bastones para jugar o tienen que hacer rifa para jugar. Si alguien desde fuera lo viera, diría que queremos perder, no queremos hacer deporte. Hay cosas de sentido común.

- ¿Usted también juega fútbol?
- Me he dado cuenta que no soy tan mala (ríe). Pero viene la pelota y tengo que poner las manos atrás porque se me van solas. Lo pasamos bien. Jugamos un ratito y así aprovecho de descubrir otras disciplinas.