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Arcos

Ahora es de verdad

Lo mismo que escribí tras el partido con Rusia. Los partidos amistosos no son para sacar conclusiones tajantes. Sirven. Aportan. Se debe analizar en ese contexto.

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Ahora es de verdad
DANIEL MIHAILESCUAFP

Lo mismo que escribí tras el partido con Rusia. Los partidos amistosos no son para sacar conclusiones tajantes. Sirven. Aportan. Se debe analizar en ese contexto, el de un partido donde no se suman puntos y se realizan seis cambios por equipo, con la distorsión táctica que eso conlleva. Si Chile ganaba 7-0 o perdía por goleada contra Rumania, no da para definiciones absolutas, pero sí es necesario advertir los errores para no repetirlos en la Copa Confederaciones, en las eliminatorias, en un Mundial.

Por parte. Es difícil que si anotas dos goles pierdas un partido. Después de 25 minutos brillantes, el equipo dejó despertar al rival. En el arranque anotó dos golazos y pudo convertir dos más. Pero la Roja le regaló opciones a un equipo que no llegaba con ese tiro libre del primer descuento del local.

Goles conceptualmente similares. El primero de tiro libre. El segundo de distancia pegado al palo. El tercero un remate de lejos que no atrapa Herrera.

En una instancia real no se puede dar el lujo de jugar con uno menos. La expulsión de Medel (o de quien sea), en un partido de verdad te liquida. Y te puede costar una clasificación.

Hay posiciones donde Chile no tiene relevo. Varias. En el segundo tiempo no actuaron los zagueros centrales titulares. Medel expulsado, Jara fuera del equipo. Si a eso le sumamos la salida de Marcelo Díaz, el equipo se desplomó en cuanto al orden.

La distancia entre Herrera y Claudio Bravo es real. Y cuando no está la defensa íntegra se nota mucho más.

Alexis Sánchez y Eduardo Vargas desaparecieron en la segunda parte. Por los cambios. Por mantener la estructura defensiva, el equipo perdió potencia arriba.

Nunca es bueno perder. Pero a veces las derrotas sirven para mantener la templanza. No se puede hablar en ganar la Copa antes de jugarla. El equipo está. La base está. Un resbalón incluso puede ayudar. Porque ahora es de verdad.