Las claves tácticas que definirán el duelo de la Roja ante Perú
Los incaicos propondrán un partido defensivo tal como frente a Uruguay y, con ese desarrollo, tres aspectos incidirán en que Chile pueda optar al triunfo.
Con la selección de Brasil ya instalada en la final de la Copa América 2019, tras vencer por 2-0 a Argentina, esta noche Chile buscará similar logro frente a Perú. En caso de éxito, la Roja llegaría a disputar su tercer partido por el título del certamen continental en los últimos cuatro años. Todo un mérito para el cuadro nacional.
Eso sí, no será nada de fácil para los dirigidos por Reinaldo Rueda. La gran traba es el elenco peruano, que eliminó a Uruguay y planteará seguramente un trámite de partido similar. Venció por penales 5-4 con un plan de juego defensivo, apostando por el contrataaque. Esto le planteará a Chile situaciones tácticas clave, de cuya resolución dependerá el triunfo de la Roja.
'Catenaccio' peruano
Los peruanos no remataron en ninguna ocasión a la portería del uruguayo Fernando Muslera durante el encuentro por cuartos de final. El dato pone de manifiesto que concentraron su labor en contener al cuadro rival, con un repliegue intenso de sus líneas, a pasos de su propia área penal, y sin temor a ceder la iniciativa ni entregar terreno y balón al elenco charrúa.
La propuesta les dio buenos resultados, por la espesura de la estructura de contención, conformada por los cuatro defensas junto a los dos volantes centrales y la asistencia de los mediocampistas externos. En este escenario, resultará clave que Chile mantenga la anchura del trío de atacantes, reforzada por las subidas hasta simultáneas de los laterales. Semejante amplitud garantizará el surgimiento de espacios por el centro para lograr profundidad ofensiva, el gran anhelo táctico en este tipo de partidos.
Cuidado con Guerrero
En el último partido se enfrentó con los espigados y fornidos Diego Godín y José María Giménez, pero Paolo Guerrero no le hizo el quite a la disputa. En algunos instantes, actuó solo contra toda la defensa de Uruguay y, por su cuenta, generó situaciones de ataque. En un avance fue derribado dentro del área y Perú reclamó penal en su favor.
El centrodelantero del Internacional de Porto Alegre es el principal agente ofensivo de los incaicos. Bajo el contexto de un plan de juego defensivo, como probablemente ocurra ante la Roja, lo buscan con habilitaciones largas para recorrer espacios amplios e imponerse por velocidad, fortaleza y buen manejo del balón.
Gary Medel y Guillermo Maripán serán los encargados de su marcación. No será un labor fácil y, en torno a esto, resultará clave que con la Roja en posesión del balón, buscando los espacios para ocasionar situaciones de ataque, ambos centrales mantengan bajo control al peruano. Será crucial su ubicación cercana a Guerrero, con uno en situación de marca y el otro en plano de cobertura, para intervenir en forma inmediata, durante la génesis de la maniobra, cuando el ariete resulta más controlable.
Más cerebro que músculo
Lo más probable es que en el trámite que se anticipa del duelo la Roja maneje a su discreción el balón. También es factible que cuente con espacio y tiempo para la circulación y, bajo esos parámetros, la serenidad táctica del trío de volantes nacionales resultará clave.
No apresurar la profundización del juego sin la brecha disponible para ello e insistir en los cambios de orientación fluidos, desde un flanco hacia el otro, para movilizar al bloque defensivo rival jugarán un papel trascendente. En este sentido, la labor de Charles Aránguiz y Arturo Vidal otra vez será de suma importancia.
Ambos manejan el pulso del equipo y contra Perú la Roja precisará más cerebro que músculo para sacar adelante la semifinal. Aránguiz es un aventajado en la lectura de juego, realizando lo que el partido exige en cada situación, pero Vidal en ocasiones va más allá de la línea. Y ante un rival que seguramente esperará una envestida tras otra, el volante del Barcelona deberá maximizar el control de sus impulsos futbolísticos.