El exitoso proyecto de la UC que lo dejó otra vez en la cima

Universidad Católica volvió a cerrar el año como el mejor club chileno, lo que consagró con el título del Torneo Nacional y con las semifinales de la inconclusa Copa Chile. El cambio de técnico pareció no afectar al equipo.

Si bien la escuadra cruzada volvió a quedar al debe en el plano internacional, se consolidó como el club chileno que mejor viene haciendo las cosas desde el 2018, y en AS analizamos las claves de su éxito.

Nuevo acierto en la elección del técnico

La sorpresiva renuncia de Beñat San José generó incertidumbre en los cruzados con el proyecto para 2019, que buscaría volver a posicionar a la UC como protagonista de la escena internacional, pero la elección del reemplazante del español fue acertada.

Gustavo Quinteros llegó a la banca de San Carlos y mejoró el estilo de juego de San José: deleitó con un juego pulcro en ataque y en varias ocasiones goleó a sus rivales, además de sufrir poco en defensa.

Para el 2020 se vuelve a repetir la fórmula, pero por la reputación de Ariel Holan, parece que vuelven a ir por buen camino con la elección del nuevo técnico.

Mantener el eje del equipo campeón

El plantel que ganó el Torneo 2018 no sufrió grandes cambios para 2019 y el cuadro cruzado mantuvo a los jugadores más emblemáticos del título anterior: Fuenzalida, Aued, Dituro, Buonanotte, Sáez, Fuentes...

Estos jugadores fueron la base para conformar el equipo que triunfó en 2019 con los nuevos refuerzos que dispuso la gerencia técnica cruzada.

Refuerzos que rindieron

La dirigencia del cuadro cruzado volvió a tener grandes aciertos con los jugadores que apostó por traer a San Carlos: César Pinares, Juan Cornejo, Edson Puch y Alfonso Parot fueron los más destacados y quienes marcaron diferencias en sus puestos. Duvier Riascos fue el único que no dejó muy buena impresión tras su paso por los cruzados.

Consolidación de los canteranos

Tras tener un promisorio 2018, los juveniles cruzados ganaron terreno y obtuvieron un papel más protagónico en el equipo: Benjamín Kuscevic se consagró como central junto a Germán Lanaro.

Raimundo Rebolledo le dio una alternativa sólida a Quinteros por la banda derecha, para rotar con Stefano Magnasco por la banda derecha. César Munder tuvo varias oportunidades e Ignacio Saavedra tuvo un gran desempeño, pero una lesión lo tuvo varios meses fuera de las canchas.

Apostar por el regreso de formados en casa

Jeisson Vargas, Cristopher Toselli, Alfonso Parot y Francisco Silva regresaron a San Carlos para reforzar al equipo en 2019 y todos, a excepción del 'Gato' por su lesión, aportaron cuando Quinteros los necesitó.

Vargas y Toselli jugaron en mayor medida en Copa Chile, mientras que Parot se ganó un puesto en el equipo titular para jugar durante el Torneo Nacional. El regreso de los canteranos volvió a funcionar.