ADN RadioConcierto Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Colo Colo

El nuevo “jefe” en el Monumental

Emiliano Amor vive el mejor momento desde que llegó hace un año a Colo Colo y la defensa se resiente sin el argentino. Los hinchas cada día reconocen su aporte.

Actualizado a
El nuevo “jefe” en el Monumental
MARCELO HERNANDEZ/PHOTOSPORT

En Colo Colo crecen las expectativas en torno a su destino en el Campeonato Nacional y también en el Grupo F de la Copa Libertadores. Los albos comandan las posiciones en ambos certámenes y, en medio del buen momento futbolístico, Emiliano Amor empieza a convertirse en un hombre imprescindible en la escuadra que dirige Gustavo Quinteros. Lo demostró en el triunfo por 2-1 ante Cobresal y curiosamente también al no estar presente en el duelo contra Alianza Lima, en el Monumental.

Figura dentro y fuera de la cancha

En la victoria que le permitió a Colo Colo volver a compartir el liderato con Unión Española, el argentino fue el mejor hombre de la cancha. Abrió la cuenta en un córner, ganando la posición en el área de meta, y más tarde asistió en gran forma a Pablo Solari para que este anotara el 2-1. Ante el elenco peruano en la Libertadores, no actuó a raíz de la expulsión contra Fortaleza, en Brasil, y se notó su ausencia. Sobre todo en los minutos finales, cuando la visita había descontado y se acercó a la igualdad, lo que hubiese sido un despropósito en vista de la enorme superioridad alba durante todo el encuentro.

“Me siento muy cómodo y feliz, sólo me queda agradecer a la gente que me ha demostrado cariño desde que llegué”, manifestó Amor luego de superar a Cobresal. Con su renovación de contrato a inicios de 2022, el zaguero estableció un vínculo contractual de tres temporadas y la ovación que recibió en el Monumental reflejó que los hinchas valoran cada vez más su desempeño.

Gran 2022

Amor fue la gran apuesta de Quinteros en 2021 para reforzar el centro de la defensa y la regularidad mostrada por el trasandino le dio plenamente la razón al DT. Hoy, es un hombre clave en el funcionamiento de Colo Colo, tanto que los que han alternado junto al ex Vélez Sarsfield han sido Maximiliano Falcón y Matías Zaldivia. El uruguayo y el también argentino inicialmente aparentaban con mayores chances de titularidad en el escenario de encontrarse en buenas condiciones físicas, pero no ha sido así.

Según las estadísticas del Campeonato Nacional de AS, Amor sobrepasa a todos los zagueros del certamen en un aspecto del juego que expresa también la prolijidad de su desempeño. Es líder en Intercepciones, con 30 acciones de este tipo. Lo secundan Fabián Torres de Audax Italiano (28) y Marcelo Jorquera de Cobresal (21). Uno de los rasgos de juego del colocolino es la precisión de sus intervenciones, gracias al seguimiento previo de las maniobras rivales, lo que le permite en ocasiones hacerse del balón durante el viaje de este hacia su destino inicial. La cifra indicada, por lo tanto, no es casualidad.

Equilibrio y prudencia

Al cumplirse un año desde su llegada a Colo Colo (fue anunciado como fichaje en abril de 2021), el aporte de Amor en la defensa resulta evidente. Actuando siempre como central izquierdo, el argentino brinda juego posicional correcto (se ubica siempre donde lo exige la jugada) y eficacia en el uno contra uno gracias a la prudencia para retardar adecuadamente la acción del rival. Ahora último adicionó una interesante capacidad para comandar las salidas desde el fondo, sin complicarse en exceso con el balón ni perder la claridad en las habilitaciones.

Por esto, su presencia en la zaga desde el primer instante ha operado como un contrapeso a la vitalidad desbordada de Falcón y frente a la inestabilidad de Zaldivia. Al argentino-chileno le ha costado acercarse a ser el de antes, luego de un par de serias lesiones y la consiguiente falta de regularidad en el equipo titular. Amor equilibra constantemente a la oncena, avanzando y retrocediendo junto a la última línea o “cerrando y abriendo” desde su lugar en la zaga, de acuerdo a lo solicitado por el trámite del partido. Con el central en la cancha, los albos irradian mayor seguridad, lo que evidentemente para un defensa es el máximo triunfo individual.