La Calera de Rivero protagoniza la mejor campaña de su historia

La Calera ha sido uno de los animadores del Torneo Nacional durante todo el 2018. Bajo la conducción de Víctor Rivero, y con una forma de juego adaptada a las características del plantel, los cementeros no han dejado la zona alta de la tabla de posiciones. Ahora, incluso son los escoltas del líder Universidad Católica, que con 44 puntos lidera el campeonato.  

El elenco dirigido por Rivero, literalmente, hace historia, puesto que nunca antes el club cumplió una campaña tan destacada. El cuadro cementero posee un 66,7 por ciento de rendimiento, un promedio de goles a favor de 1,71 por partido y la cifra de tantos en contra asciende a 0,95 en cada encuentro.

'Fantasmita' Pereyra, el desbancado

Para acercarse a una campaña más o menos parecida hay que retroceder en el tiempo hasta el Clausura 2014-2015. Entonces, el DT era Ariel 'Fantasmita' Pereyra y el plantel terminó el certamen en la quinta posición, clasificando a los playoffs.

El equipo de la Región de Valparaíso tuvo un rendimiento de 52,7 por ciento, un promedio de 1,94 goles a favor por duelo y 1,53 en contra. Era hasta el momento actual lo mejor que había hecho en su larga existencia. 

El doblete de Emiliano Astorga

Otro torneo con rasgos similares es el Apertura del año 2011. Los cementeros, quienes eran dirigidos por Emiliano Astorga, lograron un 50,8 por ciento, se clasificaron a los playoffs y resultaron eliminados en esta etapa por la UC, pero en la tabla general ocuparon el tercer lugar. Sumaron 32 puntos en 21 partidos jugados, con una media de un gol a favor y 0,95 en su propia portería.

También con Astorga como DT, ese mismo año los caleranos ocuparon la quinta posición, producto de 24 puntos en 19 duelos disputados. Es la cuarta mejor campaña del cuadro cementero, consiguió un 42,1 por ciento de rendimiento y 1,21 goles por partido fue el promedio tanto de conquistas a favor como en contra.

Otros datos de Rivero

En la actualidad, La Calera es el equipo con menor promedio de posesión de balón en el fútbol chileno. La cifra asciende a 41,1 por ciento, lo que claramente no incide en su efectividad ofensiva. El 13,8 por ciento de sus disparos terminan en gol, mientras que sus rivales solo logran un 6,8 por ciento de eficacia.

La escuadra de Rivero anota cada 7,2 tiros, mostrando alta capacidad de precisión en sus llegadas al arco rival, pues en promedio dispara en 12,4 oportunidades. Los cuadros oponentes lo hacen solo después de 14,7 remates, un valor incluso por sobre la media de envíos recibidos, que es de 14 por partido. Lo anterior retrata a los cementeros como un equipo peligroso en ataque y con gran seguridad defensiva.