FÚTBOL CHILENO
La atrevida apuesta del "Pillo"' Vera: los tres "10" en Curicó
El DT optó por la titularidad de Blanco, Espinosa y Cortés. Los albirrojos obtuvieron dos triunfos seguidos y aseguraron la permanencia en Primera División.
Finalmente, Curicó logró mantener la categoría en Primera División. Los dirigidos por Jaime "Pillo" Vera derrotaron por 2-0 a La Calera, en el Estadio La Granja. Con 34 puntos, quedaron en un puesto inalcanzable para San Luis y Temuco, los cuadros que hoy estarían descendiendo.
El elenco albirrojo evidenció un repunte futbolístico marcado en las últimas dos fechas del Torneo Nacional. Antes de vencer a los cementeros en la jornada recién pasada, había superado por 2-1 a Temuco, desprendiéndose del equipo de La Araucanía como su rival en la lucha por la permanencia.
La apuesta de Vera
En esa oportunidad, en el Estadio Germán Becker, el "Pillo" Vera sorprendió con una inédita conformación en el mediocampo. Por primera vez, el DT alineó desde el inicio a Martín Cortés, Carlos Espinosa y Ricardo Blanco, tres números "10" en la formación curicana.
En esa victoria por 2-1 como visita, el entrenador dispuso un rombo en la mitad de la cancha con Carlos Cisternas como volante central, Sebastián Zuñiga y Cortés, quien ha evolucionado a una posición más retrasada, en los puestos de interiores y Espinosa cumpliendo la labor de enlace. Blanco actuó en el rol de mediapunta, con libertad para desplazarse entre el mediocampo y la zona de ataque para acompañar a Mauro Quiroga.
Con la variante táctica, el equipo de la Región del Maule mejoró notablemente en la posesión del balón. El incremento fue en términos cualtitativos, pues finalmente Temuco se impuso en este aspecto con un 50,6 por ciento de tenencia. Espinosa garantizó una buena cuota de pases de profundidad ofensiva y Blanco, con su buen disparo y dribling, complicó a la zaga rival.
Lo mejor ante La Calera
Frente a La Calera, Vera incluyó a Gabriel Vargas como segundo centrodelantero, junto a Quiroga. Entonces, el mediocampo quedó organizado con Cisternas de "6" y el doble "8" formado por Blanco y Cortés. Espinosa se mantuvo en el puesto de "10".
La modificación le otorgó más peso en ataque. Fundamentalmente, a raíz de la presencia de arietes con oficio, facultados para actuar sin problemas de espaldas hacia el arco rival y con inteligencia para realizar correctas diagonales en la zona ofensiva.
Sin embargo, lo mejor aconteció en la mitad de la cancha. La presencia de los tres zurdos ahondó la precisión y justeza en el manejo del balón, llegando a un 67 por ciento de tenencia de la pelota. El local controló el partido a través de una posesión orientada hacia la búsqueda de los dos "9", lo que incidió en un funcionamiento colectivo en ataque más afiatado.