Leopoldo Iturra

Cuesta entender cómo un tipo que en la temporada 1977 obtuvo 16 títulos, incluídos Roland Garros y el US Open, no haya sido número uno del mundo.

Mark González, Roberto Gutiérrez y Gonzalo Espinoza fueron sin duda quienes mejor "aprovecharon la oportunidad".

Sólo se sabrá si el fixture era bueno o malo cuando exista el otro. Y ambos se puedan comparar. Antes de eso, no lo celebraría como un triunfo.

¿Pueden explicarme cómo se puede comparar a un goleador con un arquero? Usando metáforas bélicas del fútbol, ¿cómo comparar un guardián con un artillero?

Después de la derrota contra Colo Colo, cuando entró la duda y las fuerzas flaqueaban en la U, Pato Rubio anotó seis goles en los siete partidos finales.

Colo Colo por fin ganó la estrella 30. Y la 31 la perdió en un final cinematográfico contra su archirrival, Universidad de Chile, y Santiago Wanderers.

Esas historias que cuentan que Roger Federer y Thomas Enqvist dijeron que por el único tenista que pagarían una entrada para verlo jugar era Marcelo Ríos, son absolutamente ciertas.

Me acordé del bizarro gol de Basay a Brasil camino a Italia 90. Fue tan raro como ese. Me acordé del gol de arco a arco de Brunelli a Velasco. También fue en Playa Ancha.

La comarca regiomontana llora la partida de Chupete y acá en Santiago, con tanta lágrima de los rayados, recién valoran lo que hizo el sanantonino en Monterrey.

Elías Figueroa es desde esta semana columnista de Diario AS. Simplemente un lujo.

El pan batido posiblemente no esté más crujiente mañana, pero el Decano es grande. Siempre lo ha sido. Igual que su gente.

Fueron 25 años sin ser campeones donde la U forjó una devoción con sus hinchas que no tiene ninguno de los otros equipos de este país.

Bueno saber que Fernando González sigue disfrutando con el tenis, después de un retiro motivado por lesiones y cansancio. Y bueno ver que la dinamita sigue intacta en su brazo

Hablando con el corazón, quedar emparejado contra México, Ecuador y Bolivia, es un tremendo negocio para Chile.

Federer evidenciaba no estar al ciento por ciento. Le echó mano a una buena dosis de su clase para ganar el doble y despachar a Gasquet en el punto decisivo.

Quizás los rivales de Chile ya le conocen el libreto. O tal vez el vértigo ya no les asombra. Habría que tomar en cuenta eso.

Si algún día les cumplieran las promesas, no les iría tan bien. La adversidad las hace más fuertes.